Ni cesta navideña ni aumentos: un empresario ofrece un crucero a sus trabajadores tras cumplir objetivos

Los incentivos de las empresas a sus trabajadores no son algo extraordinario. Hay las que, después de un buen rendimiento o haber conseguido unos resultados marcados o incluso haberlos superado, deciden hacer algún regalo como agradecimiento por el esfuerzo realizado, siendo típicas las cestas con degustaciones culinarias o paletas de jamón en el caso de España, pero otras deciden tirar la casa por la ventana y hacer un dispendio enorme para que sepan que sus superiores están orgullosos de ellos y recompensarles de alguna manera material y cuantificable.

Es lo que ha ocurrido con una empresa italiana llamada Festucci Srl, con sede en el municipio de Guidonia, cerca de Roma, que basa su actividad en la fabricación de puertas, ventanas, sistemas de oscurecimiento y mobiliario hecho a medida, que para celebrar los objetivos cumplidos antes de finalizar el año en cuanto a producción y organización, ha decidido premiar a sus 30 empleados con un crucero por el Mediterráneo, como informan en TGCOM24. Además, aseguran desde la dirección que lo más importante es disfrutar de un momento de convivencia fuera del entorno laboral.

A este viaje estuvieron invitados ellos y sus familias, saliendo desde Génova el pasado 21 de noviembre para estar un fin de semana donde pasarían por Marsella y Barcelona. Todo estaba dispuesto de tal manera para que no tuvieran ningún tipo de inconveniente, con autobuses que les llevarían al puerto para que trabajadores, cónyuges, parejas e hijos pudieran estar en el lugar de encuentro para subirse a la embarcación, lo que supuso que unas 60 personas estuvieran invitadas con todos los gastos pagados por parte de la empresa.

Satisfacción de los empleados

En Il Messaggero hablaron con algunos de los trabajadores antes de que se realizara el viaje y destacaron la importancia que suele darle la empresa al buen ambiente laboral, aunque esto ha sido una sorpresa impresionante para todos. "Tenemos reuniones sociales, pero un viaje como este es el primero que hago en 30 años trabajando para esta empresa", comentaba Luca Ceccarelli, empleado técnico, mientras que Stefano Bianchi iba un paso más allá manifestando que "hemos superado muchas dificultades en toda Italia; hoy nos enfrentamos a nuevos retos, cada vez más complejos".

Ludovica, que actúa como secretaria, se congratula de haber caído en este lugar a sus 21 años, tanto por el entorno profesional que le ayuda a crecer como por sus compañeros, a los que destaca sobremanera. "Al incorporarme a esta empresa, supe que había tomado la decisión correcta", decía en la misma línea Angelo, al igual que piensa Federico, que destacó la correcta formación que dan, afirmando que ha mejorado su profesionalidad "gracias a los cursos de actualización que la empresa ofrece cada año", a lo que se le suma la sorpresa de este tipo de incentivos.