Diego Montesino (Faro Asesoría): "A medio y largo plazo se pueden reducir los costes de energía de una empresa"

Pamplona

Con los precios de la energía eléctrica por las nubes, cobra más valor el desempeño de una empresa consultora para abordar soluciones energéticas más baratas para las empresas. Faro Asesoría es una joven empresa -dos años de antigüedad- fundada por Diego Montesino, un ingeniero industrial navarro con experiencia en el mercado energético y en proyectos de eficiencia energética y que ha trabajado en una multinacional. Ahora, desde su decisión de fundar esta consultora, "nos dedicamos a implantar estrategias de compra de energía para solucionar este problema que tienen las empresas con sus facturas energéticas".

Faro Asesoría es una empresa que forma parte de ANAIT, la Asociación navarra de Ingenierías, Oficinas Técnicas y Servicios Tecnológicos.

Montesino apunta a la preocupación de muchas empresas con consumos y costes energéticos ya de por sí elevados, "pero ahora se ha incrementado el precio y es ya una preocupación importante porque el impacto empieza a ser un porcentaje alto sobre el coste final del producto". "Intentamos dar la mejor solución a cada una de las empresas trabajando codo con codo con ellas para orientarles a implantar la manera de comprar energía". Y es que, según este ingeniero, "hay muchísimas maneras de comprar la energía; hay que intentar que cada forma de comprar se adapte al perfil de riesgo que tiene la empresa y sobre todo a cómo impacta en su producto final ese coste energético".

En una nueva edición de La Ventana de la Empresa navarra, a la pregunta de si siempre se pueden reducir los precios de la energía que pagan las empresas, Diego Montesino se muestra convencido de que "en el medio y largo plazo, sí". "Hay que entender bien cómo funciona el mercado; implantando una estrategia intentamos que en el medio y largo plazo ese coste sea menor que el que hubiésemos tenido sin una estrategia bien definida". Las fórmulas para contratar la compra de energía tiene mucho que ver con el mercado de futuros. "No es tanto una apuesta sino cuanto queremos asegurar el precio de la energía a futuro o cuánto podemos intentar no asegurarlo y si conseguimos también cierto margen para mejorarlo en coste". Y añade: "Lo importante es que la empresa se sienta cómoda con el precio que va a pagar por la energía y que sepa cuánto va a pagar y, sobre todo, que sea un coste que en su producto final sea algo cómodo".

Explica que uno de los valores de su trabajo tiene que ver con la independencia de las empresas que generan la energía: "Conseguimos la alineación de intereses con las empresas con las que trabajamos. Nuestro servicio se prolonga en el tiempo manteniendo una estrategia, implementándola y llevándola a cabo, proponiendo mejoras y las diferentes opciones a las empresas en el periodo que dura nuestra relación, que generalmente es bastante alto. Hacemos seguimiento, monitorización de consumos, optimizaciones de potencia... todo lo que engloba la gestión energética de una empresa". Una labor que resume como el trabajo de "un pequeño departamento de ingeniería dentro de la empresa, que lo que quiere es lo mejor para la empresa".