Economía y negocios | Actualidad

Industria y robótica al servicio de la construcción en Navarra

El sector trata de incorporar técnicas que pueden cambiar la forma de levantar edificios

El sector de la construcción se abre a nuevos retos con los procesos de industrialización y robótica. / cadena ser

Pamplona

En el futuro puede que los tajos de obras de construcción de edificios -sean de viviendas, dotacionales o industriales-, puedan cambiar de forma notable con respecto a lo que estamos acostumbrados a ver. Cambios en las formas de trabajar y en los ritmos y procesos. A ello puede contribuir la incorporación de técnicas de industrialización y robótica al sector de la construcción. Por ejemplo, contando con muchos más elementos de un edificio fabricados previamente en una nave industrial. Son técnicas muy novedosas en España pero más habituales ya en países del norte o en el centro de Europa.

Con el propósito de avanzar en la incorporación de estas técnicas, se presenta este jueves en Pamplona el Clúster para la Industrialización del sector de la Construcción, que tiene como fin el impulso del desarrollo de la industrialización y la innovación, así como la mejora de la competitividad de las empresas e instituciones asociadas, trabajando con todos los agentes que operan en la cadena de valor de la construcción en la Comunidad foral.

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Íñigo Eugui es el presidente de esta asociación navarra y explica que ha percibido "mucho interés por parte de todo el sector, que en estos momentos está buscando superar los nuevos retos a los que se enfrenta y sobre todo se centra en la industrialización y digitalización de estos procesos. La verdad es que ha habido muy buena respuesta". Añade que "la primera idea va a ser la búsqueda de las nuevas tecnologías que ya se están implantando en países más avanzados , como pueden ser los del norte de Europa, donde la construcción industrializada ya tiene más presencia de la que pueda tener aquí. Una de las consecuencias inmediatas es que haya una prefabricación para que lo que sea construcción in situ vaya más automático o con una velocidad superior".

Y claro está, se puede pensar que la plantilla de albañiles y empleados de otros oficios podría disminuir en las obras del futuro: "En el momento en el que se está propiciando una transformación del sector, todos los agentes que intervenimos vamos a tener que sufrir una adaptación y una nueva formación porque los procesos en principio cambian, con lo que es algo que afectará a todos los niveles", reconoce.

No es casualidad que este clúster surja en Navarra. Eugui destaca el capital humano existente en la Comunidad, la calidad de las empresas de la construcción, punteras en aspectos como la eficiencia energética o los parámetros de calidad constructiva, el hecho de contar con dos centros universitarios y, desde luego, la próxima implantación de un Centro nacional de Industrialización y Robotización.

UN CENTRO DE INVESTIGACIÓN Y FORMACIÓN PARA EL CURSO 23-24

Sobre el futuro de ese centro, el vicepresidente segundo y consejero de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos estratégicos del Gobierno de Navarra, José María Aierdi, recuerda que en estos momentos se está modificando el PSIS de la Universidad Pública de Navarra para que el proyecto pueda adjudicarse "lo más rápidamente posible" de forma que a principios de 2023 pueda iniciarse esta actuación. El Centro nacional de industrialización y robótica de la construcción cuenta con financiación por parte de dos ministerios del Gobierno de España por un importe de 3.600.000 euros a los que hay que sumar otra partida ministerial de 300.000 euros para el gasto operativo de funcionamiento, y que se complementará con una cantidad equivalente por parte de la Administración foral. Y los planes para este centro pasan por tenerlo en funcionamiento para el curso 23-24. "Por esta razón estamos trabajando con el sector privado, con las empresas, que están iniciando este recorrido de la construcción tradicional hacia la industrialización y la robotización de los procesos de la construcción para que hagamos un esfuerzo colectivo desde lo público y desde lo privado", señala Aierdi.

Y explica que este centro pionero va a tener dos patas, una de ellas encaminada a la formación dirigida a másteres tanto de arquitectura como de ingeniería, y a la formación profesional, debido a las necesidades de formar a nuevos trabajadores en este sector demandadas por parte de las empresas. Por otro lado, "el desarrollo de proyectos piloto experimentales que podamos hacer en colaboración desde las empresas privadas y la administración, colaborando en este sentido con las dos universidad presenciales navarras y también universidades foráneas, como el Politécnico de Zúrich, en Suiza, un centro que lleva muchos años trabajando en este sentido". También se trata de alcanzar convenios con promotores y constructores "de forma que podamos desarrollar proyectos de construcción que permitan avanzar más rápidamente a la gente que vayamos a formar en posgrados en el centro", explica el consejero.