Dos meses después del asesinato de su madre, cuatro huérfanos de violencia de género tienen solo 14 euros en la cuenta

Pamplona

Estás en shock porque tu madre ha sido asesinada en un caso de violencia de género en Navarra. Tras pasar unas semanas con unos familiares, regresas junto con tu hermana a tu domicilio familiar en la Comunidad foral y te encuentras con 14 euros en la cuenta. Es lo que les ha pasado a los hijos de Zhen Jiang, más conocida como Eva, que fue asesinada este julio en Navarra. Los cuatro son estudiantes -solo dos residen en Navarra-, una es menor de edad, y no tienen trabajo. Los cuatro vivían gracias a los ingresos de su madre, cuya pareja y socio comercial acuchilló mortalmente este pasado julio en el bar que regentaban en el barrio pamplonés de Ermitagaña. "Las facturas han estado girando igualmente, tienen que seguir con la hipoteca, con todos los gastos de la vivienda y no ha habido ingresos". La situación es dramática, explica Izaskun Gartzaron, responsable de la Oficina de Víctimas del Delito del Gobierno de Navarra. No les afecta solo a ellos. Desde 2021, dos asesinatos calificados como violencia de género han dejado ocho huérfanos de madre en Navarra, tres de ellos menores.

"Estamos hablando de meses de tramitación"

Desde la Oficina les están ayudando a gestionar ayudas como la Renta Garantizada y otras extraordinarias, pero los plazos para que les sean concedidas son de mínimo un mes. "Rara vez suelen concederse en menos de 30 días, aunque el compromiso para los expedientes de la Renta Garantizada relacionados con las víctimas de violencia de género es que se resuelvan en 30 días. Se podría también solicitar ayudar extraordinarias para el pago, por ejemplo, de facturas de luz, de agua, las ayudas por la hipoteca, pero no van a ser instantáneas ninguna de ellas". Se tarda, de media, 45 días en obtener una respuesta y no siempre es positiva en primera instancia. La cuestión empeora cuando se habla de las pensiones de orfandad. "Estamos hablando de meses de tramitación, tal y como está a día de hoy la Seguridad Social y el resto de tramitaciones que van a necesitar para obtenerla". Hay comunidades como Euskadi o Aragón que tienen ayudas autonómicas complementarias a la pensión de orfandad, pero no es el caso de Navarra. "Como huérfanos de una víctima de violencia de género no hay una ayuda económica específica en Navarra a día de hoy. No van a tener una ayuda nominativa por ello". Sí tendrán una vía más rápida para tramitar las ayudas o descuentos en el sistema público de enseñanza, en clubes deportivos o en escuelas de idiomas. "Los tendrán en todos aquellos organismos que tengan reconocida esta prestación, que cada vez son más en la Administración foral y municipal, pero no existe una ayuda nominativa o personal para este tipo de situaciones. Al menos todavía no se ha contemplado", explica Gartzaron.

Es el principal problema de las ayudas: "Nada es automático, nada es tan instantáneo como ellos necesitan. La única salida que se ha podido obtener rápida y efectiva, de un día para otro, ha sido acudir a Cáritas. En Cáritas, justificando los gastos que tienen de sostenimiento de la vivienda familiar, se van a hacer cargo de esos gastos hasta que no tengan otro tipo de ingresos". Mientras tanto, sobreviven gracias a la ayuda de un familiar. Hay otra preocupación inmediata: ¿cómo pagan la hipoteca de la vivienda familiar? Entre las posibilidades, está el cancelarla con el seguro de vida que tenía Zhen Jiang, pero es otro trámite que llevará tiempo.

El tiempo es el problema más grave. No hay duda de que estas cuatro personas podrán acceder en un futuro a las ayudas estatales porque cumplen los requisitos para ello. También para el subsidio que concede una ley estatal del año 95 a la que solo pueden acceder víctimas de delitos muy graves cuyas secuelas tengan una consecuencia a nivel patrimonial en la unidad familiar. "Este es su caso". Es una ayuda que se "paga de una sola vez", que se puede solicitar hasta tres años después de que haya una sentencia firme en el caso de su madre y cuya tramitación es muy compleja. A futuro, reconoce Gartzaron, puede solventarles, por ejemplo, el pago de sus estudios, pero no es lo que necesitan de manera urgente. Gartzaron también pide reflexionar sobre esta ayuda: "Imagínate que a la mujer a la que hubieran asesinado no trabajara o no ingresara nada porque acaba de llegar -de otro país-. Estos chicos se hubieran visto con muchas dificultades para poder cobrar la ayuda del Estado porque se condiciona a que haya secuelas económico patrimoniales en la vida de la víctima o los supervivientes a la víctima". Es el caso de otra menor residente en Navarra cuyo padre fue asesinado en 2018. "Llevamos año y medio con la solicitud de la ayuda y no nos han contestado positivamente. Solamente requerimientos de más documentación, de más papeles. De momento tenemos una respuesta que no ha sido positiva". A todo esto, por si fuera poco, hay que añadir la tramitación de la tutela de la hija menor, que queda a cargo de uno de los hermanos mayores -su padre no se hace cargo de ellos desde hace años-.

Todos estos trámites están ocupando el tiempo e interfiriendo en el proceso de duelo de estos menores. Una ingente cantidad de papeleo que ha provocado que no puedan dedicarse plenamente a recibir una atención psicológica. Gartzaron detalla que sí recibieron "la asistencia de urgencia, de guardia", pero su "primera preocupación es el comer y, ya después, viene lo otro. La preocupación de estos chicos fue llegar y encontrarse con 14 euros en la cuenta. Una vez encaminado eso, ya nos vamos a centrar. Si ellos quieren, van a seguir un procedimiento terapéutico largo. En este sentido, Navarra es una de las comunidades "más generosas", recalca Gartzaron: "Nosotros hacemos como mínimo dos años [de atención psicológica] con posibilidad de un tercero y, si hay necesidad, se puede mantener todavía durante más tiempo. A veces nos ocurre que el juicio es después de haber finalizado el tratamiento, y si luego hay una circunstancia que hace que se desestabilicen las víctimas, se podría volver a retomar. O sea, en ese sentido tanto a nivel jurídico como a nivel psicológico, van a tener esa asistencia hasta que ellos la necesiten".

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Llamada de emergencia de la Oficina de Atención a Víctimas del Delito

La situación es seria, advierte Gartzaron: "No vamos a poder seguir atendiendo a las víctimas, nos vamos a quedar sin partida presupuestaria a finales de octubre. Nos vamos a quedar dos meses sin dinero, solo para las urgencias". Hay numerosos motivos. Entre ellos, por ejemplo, el incremento de atenciones por la entrada en vigor de la nueva ley de integridad sexual que ha derivado a esta oficina a muchas víctimas, menores y mayores de edad. Hay más. "Se ha puesto la lupa y el microscopio en todo lo que tiene que ver con la violencia de género y la violencia sexual, pero es que la sociedad también está cambiando mucho y a nivel social también estamos psicológicamente mucho peor", recalca Gartzaron.

En estos momentos en la oficina se están atendiendo, incluso, "packs familiares". Personas de una misma familia que necesitan ser atendidas psicológicamente tras el asesinato o delito grave sufrido por ellos mismos o un familiar. Por ejemplo, hay más de una decena de pacientes vinculados a, al menos, cuatro asesinatos cometidos en la Comunidad foral en los últimos años que han requerido tratamiento psicológico y ayuda para gestionar trámites administrativos.

La Oficina necesita más recursos, demanda Gartzaron, para poder hacer frente a todas estas casuísticas y realizar una verdadera labor de prevención: "Detrás de muchos agresores futuros hay víctimas primarias que han sufrido agresiones y abusos. Si podemos dar una mejor ayuda a estos chavales siendo menores de edad o siendo muy jovencitos, vamos a evitar agresiones a futuro".