El Gobierno foral pide a los ayuntamientos navarros que dejen de colaborar con el etarra Mikel Antza

Pamplona

El Gobierno de Navarra ha pedido el cese de la "colaboración" del que fuera jefe de ETA 'Mikel Antza' como coordinador del grupo de lectura del Servicio de Euskera de las localidades navarras de Erro, Burguete, Valcarlos, Valle de Arce y Valle de Aezkoa, después de que la presidenta del Covite, Consuelo Ordóñez, haya criticado esta situación. La consejera de Cultura, Deporte y Turismo del Gobierno de Navarra, Rebeca Esnaola, ha señalado que "se ha trasladado a los ayuntamientos que, entendiendo el marco del Plan de Convivencia de Navarra, cuya aplicación ha de hacerse de manera real y coherente, hemos solicitado a estos ayuntamientos el cese con la colaboración de esta persona en esos grupos y clubes de lectura". Clubes de lectura, organizado por el servicio de euskera de los ayuntamientos que ceden los espacios, y que, en algunos casos, no se celebran en las propias bibliotecas.

Rebeca Esnaola ha señalado que el Gobierno de Navarra "tiene como marco en esta cuestión el Plan Estratégico de Convivencia de Navarra y ese es el marco en el que nos movemos y hemos de realizar las actuaciones e indicaciones necesarias". "Es un marco preparado para mejorar el clima de convivencia en nuestra Comunidad y es el que debe instar al Gobierno de Navarra y a las entidades locales para que se garanticen espacios públicos de convivencia y esas son las cuestiones que hemos trasladado a los ayuntamientos", ha afirmado.

Mikel Albisu, más conocido como Mikel Antza, es en la actualidad el coordinador del grupo de lectura de diferentes bibliotecas públicas de Navarra. Este miércoles, la presidenta de Covite, Consuelo Ordoñez, ha explicado que en la actualidad "todavía tiene causas pendientes con la justicia", entre ellas el caso de la autoría intelectual del asesinato de su hermano Gregorio Ordoñez. Según la presidenta de Covite, es “toda una afrenta para la memoria y la dignidad de las víctimas” que Mikel Antza ostente este puesto y ha exigido a las instituciones públicas que no fomenten “que alguien de su trayectoria asuma la responsabilidad del grupo de lectura", cuya función es precisamente ser "un lugar de reflexión y de transmisión de valores".

Es uno de los ejemplos que Ordóñez ha expuesto sobre las cuestiones que "dificultan una convivencia en paz y libertad en Euskadi y Navarra" y que pretenden analizar en la XXI Jornada Anual que COVITE celebra este miércoles en Pamplona, bajo el título "Déficits del posterrorismo de ETA”. Ordóñez ha enumerado otros hechos ocurridos en los últimos meses que suponen “una humillación y una afrenta a las víctimas del terrorismo”, como la exposición organizada por el Ayuntamiento de Itsasondo con pinturas del etarra Mikel Otegi, condenado por el asesinato de los ertzainas Iñaki Mendiluce y José Luis González, o el reciente ataque a la tumba de Fernando Buesa.

Son ejemplos de uno de los “déficits” de esta época de post-terrorismo de ETA, “la radicalización violenta permanente en la que vive instalada una parte de la sociedad vasca y navarra, que sigue justificando y legitimando el terrorismo, y que sigue difundiendo un discurso de odio y de humillación hacia las víctimas que se traduce en cuestiones concretas que nos revictimizan y nos causan un gran dolor” ha concluido.