Los beneficios de la mediación: "Los malos acuerdos acompañan a las personas durante mucho tiempo"

Pamplona

En un mundo en el que surgen infinidad de conflictos entre las personas, su resolución no tiene, ni mucho menos, que ser competencia de los tribunales. Hay otro métodos y uno de los más interesantes es el de la mediación extrajudicial. La mediación es un procedimiento que trata de conseguir "buenos acuerdos" entre dos partes en conflicto, defiende Margarita Pérez Salazar, magistrada del juzgado de familia número 10 de Pamplona y coordinadora en Navarra del Grupo Europeo de Magistrados por la Mediación. Defiende que el papel del juez y el papel del letrado de la administración de Justicia son importantísimos para intervenir en lo que se llama mediación intrajudicial, es decir, aquella mediación que se realiza cuando ya está en trámite un procedimiento judicial. "La labor fundamental que hacemos es la selección de aquellos casos que pensamos que pueden tener buena solución a través de de la mediación y una vez seleccionado, realizar las derivaciones, ponernos en contacto con el servicio de mediación que trabaja con los tribunales de Justicia y ya encarrilar el procedimiento de mediación."

En mediación, si las personas que tienen un conflicto como primer punto de partida pensarán en una solución pactada, acudirían a lo que se llama una mediación extrajudicial, es decir, antes de acudir a los tribunales, a ver si con la ayuda de un tercero podemos llegar a un buen acuerdo.

La importancia de lograr buenos acuerdos es algo que destaca la magistrada, porque advierte, las consecuencias de un mal acuerdo se arrastran demasiado tiempo por las personas que los sufren, advierte la magistrada pamplonesa. "Precisamente la mediación de lo que trata es de conseguir un buen acuerdo que esa es la clave, porque los malos acuerdos acompañan a las personas durante mucho tiempo y creo que no son nada buenos. Entonces, de lo que trata mediación precisamente es de conseguir buenos acuerdos, Y sería magnífico pensar que conforme la sociedad va avanzando pues que la ciudadanía tuviera integrada, de una manera normalizada el que para solucionar sus conflictos, su primera opción fuera gestionarlos de otra manera que no fuera acudir a los tribunales".

Añade las ventajas de alcanzar pactos entre la partes en conflicto: " hay que dar la oportunidad de que cuando el procedimiento, cuando el conflicto ya está en un proceso judicial, que demos también la opción a que la solución no sea solamente judicial sino que pueda ser pactada. primero porque si se hace a través de mediación, será un buen acuerdo. Y segundo, porque son acuerdos que lo realizan las propias partes en conflicto, con lo cual tiene muchas más posibilidades de que de que se cumpla, genera mucha más satisfacción. Y además, ayuda a seguir solucionando los conflictos a través del pacto.

En cuanto a los beneficios de la mediación... "creo que es devolver a las personas la capacidad de solucionar sus propios problemas. También lo es es incorporar la opción de la comunicación, sobre todo para aquellas personas que, aún cuando resuelvan a través de un proceso judicial, de una sentencia, el litigio van a continuar teniendo que relacionarse, van a tener que seguir solucionando nuevas cuestiones y nuevos problemas que van a surgir en esa relación. Entonces hay que dar herramientas de futuro, Y la mediación ayuda a solucionar el problema que ahora tenemos y aporta herramientas de futuro para seguir solucionando mejor las cosas".

La mediación judicial tiene un especial aplicación en el ámbito de los conflictos de familia: "Efectivamente, la mediación en conflictos familiares es la que inicialmente se comenzó a hacer en España. Desde luego las primeras experiencias que hubo en España fueron en mediación familiar y ahora se ha ido avanzando y ha ido ampliándose también a otras materias. En mediación familiar es donde más experiencia tenemos.

También es verdad que los conflictos familiares tienen unas características que les hacen particularmente aptos para acudir a mediación, porque en general suelen ser personas que están necesitadas de continuar relacionándose, y este es un punto de partida muy importante. "Y en los conflictos familiares realmente son variadísimos los casos que nos llegan, desde efectivamente, pues los temas de de ruptura, las separaciones, los divorcios o las rupturas de las parejas que que no están casadas, desde luego también, pero también, sobre todo cuando hay hijos, tanto menores de edad como mayores de edad pero que todavía dependen de la familia o conviven con ella; la existencia de hijos yo creo que también es es un criterio importante. Y luego últimamente, llegan muchas cuestiones relativas a las discrepancias que tienen en el modo de ejercer o de tomar las decisiones relativas a la responsabilidad parental: la elección de colegios, los cambios de residencia. La verdad es que ha aumentado mucho esto de las discrepancias y es es una materia, particularmente proclive, no y apta para para hacer mediación", concluye la magistrada.