La voz de los ucranianos desde Navarra: "Es muy duro oír que la gente se ha acostumbrado a la guerra"

Pamplona

Se cumplen dos años de la invasión rusa a Ucrania y decenas de personas se han reunido en Pamplona para "apoyar y difundir" la situación actual de los ciudadanos de Ucrania, quienes denuncian que la "lucha" se inició hace diez años y no hace dos. "Diez años y cuatro días de indomable lucha, lágrimas de madres e hijos y vidas perdidas". El acto celebrado este domingo ha contado con testimonios reales de tres personas que "se escaparon de los misiles para salvar, y a la vez perder, sus vidas" en una ciudad en la que "desde hace mucho tiempo no hay gas, agua ni electricidad".

"Es muy fuerte que la gente viva bajo bombardeos, que los niños tengan que bajar al sótano con las sirenas sonando todos los días... Está siendo muy duro para los ucranianos que están allí como para nosotros sabiendo cómo están viviendo allí". Por otra parte, la presidenta de la asociación 'Alas de Ucrania', Lili Shyshkovska, ha asegurado que "no ve el final" de la guerra. "La moral no está en sus mejores momentos y da la sensación de que este enemigo tiene recursos para aguantar mucho rato y nosotros no estamos aguantando tanto", asegura Shyshkovska.

Además, otro de los testimonios en el acto, ha manifestado el "terror" de la vida cotidiana ucraniana en estos momentos. "Se produce una intencionada destrucción de edificios residenciales, colegios, hospitales, residencias e iglesias... Vemos el terror que el ejército ruso ejerce sobre los territorios ocupados para mantener el control sobre ellos, matando a la élite ucraniana, a los voluntarios, a los periodistas y organizando secuestros y violaciones sexuales, torturas o asesinatos de civiles".

La presidenta de la asociación ha denunciado las discrepancias entre los ucranianos y las autoridades políticas asegurando que "sabían perfectamente lo que los ciudadanos deseaban". "Queríamos estar con Europa. Los políticos en su momento no lo hicieron bien y no han podido gestionar bien el tema de saber controlar la política exterior rusa frente a lo que quería Estados Unidos o Europa", ha subrayado la presidenta

El acto ha contado con testimonios en ucraniano, posteriormente traducidos en castellano, así como una canción interpretada por una ucraniana en Navarra o el himno del país. En esta línea, Anastasia Kuzmina ha denunciado que sigue siendo "muy duro" convivir con esta guerra. "Los ucranianos que vivimos aquí tenemos familias en Ucrania, hablamos con ellas, y es muy duro oír que la sociedad se ha acostumbrado a la guerra", ha denunciado Anastasia Kuzmina.

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¿Con qué recursos han contado?

Antes de la invasión de Rusia, "en Navarra había 1.472 personas procedentes de Ucrania, y un año después eran el doble, 2.847 personas", apunta Virginia Eraso, directora del servicio de acogida y acompañamiento de políticas migratorias del Gobierno de Navarra. "No obstante somos conscientes de que muchas de las personas, o bien han vuelto a sus localidades de origen o bien han vuelto a otras zonas que están cerca de Ucrania, o bien están en otras zonas dentro de lo que sería Europa; entonces nos es difícil determinar las personas que están en este momento en Navarra".

Precisamente hace dos años con la invasión de Ucrania se creaba en Navarra la oficina de atención para personas que venían de Ucrania, para familiares que ya estaban aquí residiendo en Navarra o para personas de Navarra que querían mostrar su solidaridad. Más de 1.800 personas han pasado por esta oficina. "Nosotras desde esta oficina lo que hacíamos era aglutinar tanto las necesidades y las demandas que estas familias venían acuciando desde Ucrania y también los ofrecimientos de las personas de Navarra", señala Eraso.

En cuanto a las protecciones temporales concedidas, hasta el año pasado había concedidas 1.711; y en cuanto a tarjetas individuales sanitarias, a uno de febrero, teníamos 1.195, "datos no exactos ya que ha habido mucha movilidad y no sabemos cuánta gente continúa residiendo en Navarra". Respecto a las ayudas económicas que dio el Gobierno central de 400 euros para personas que no estaban trabajando, en Navarra eran unas 600 personas las que pudieron optar por esas ayudas.