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Osasuna suma en Valencia su primer punto lejos del Sadar

Los rojillos consiguen empatar a 0 en Mestalla en un partido sin apenas ocasiones de gol. Ninguno de los 2 entrenadores quiso arriesgar en su planteamiento, esperando aprovechar un posible error del rival y pese a que los de Vicente Moreno fueron ligeramente superiores en los últimos minutos, no fue suficiente y ambos se acabaron conformando con el punto

Vicente Moreno y Rubán Baraja, los entrenadores de Osasuna y Valencia durante el partido en Mestalla / Biel Alino (EFE)

Valencia

A la tercera va la vencida. Al menos, en el caso de Osasuna, sirve para puntuar fuera. Vicente Moreno conseguía sumar su primer punto lejos del Sadar con el club rojillo. No era difícil mejorar la imagen y el resultado de Girona o Vallecas. Más cuando el Valencia, pese a jugar en casa ante su afición, no hizo demasiado para ir a por el partido. Chocaron los planteamientos conservadores de ambos técnicos. Sin arriesgar apenas con balón y buscando más el fallo del rival que generar fútbol para llegar a portería contraria. Así las ocasiones de peligro llegaron casi con cuenta gotas. Lo más justo, el empate. Ninguno de los dos equipos mereció más ni tampoco dio el paso adelante para ir a por los tres puntos. Solo quizá Osasuna llegó mejor a esos últimos minutos pero sin demasiada convicción.

Un partido de esos tácticos. Con Osasuna bien plantado y un Valencia que pese a jugar en casa tampoco quería llevar la iniciativa. Esa partida de ajedrez entre los técnicos, sin arriesgar apenas en los movimientos de las piezas, solo se alteró un poco en el tramo final de la primera parte. La mejor oportunidad para Osasuna, a balón parado. Una jugada ensayada en el laboratorio de Tajonar. Moncayola se la ponía a una de las novedades, Rubén Peña pero su remate con todo a favor salía desviado. La réplica valencianista la ponía André Almeida con un disparo desde el punto de penalti que salvaba otro de los nuevos, Herrando que volvía al once para formar junto a Boyomo en el centro de la defensa. Raúl García de Haro y Moi Gómez fueron las otras dos rotaciones que introdujo el técnico para refrescar el equipo.

En el descanso movía el banquillo Vicente Moreno con la entrada de Pablo Ibáñez por Moncayola. El de Garinoain lucía un aparatoso vendaje en la segunda parte mientras seguía el partido desde fuera. La entrada de Ibáñez dio otro aire al equipo y precisamente el de Mutilva tuvo una de las llegadas más claras. Para los 3 minutos, Peña conectaba con el centrocampista navarro pero su disparo salía desviado. El Valencia también tuvo la suya. La más clara la tuvo que evitar Sergio Herrera. La salvada habitual de cada partido del meta rojillo. En una acción poco ortodoxa paraba con el pie tirándose con el cuerpo hacia el otro palo el remate casi a bocajarro de Dani Gómez.

La entrada de Rubén García también mejoró al equipo y sirvió para que en los últimos minutos, Osasuna diera la impresión de tener más opciones de llevarse el partido. Los otros dos cambios tuvieron las oportunidades finales. Budimir de cabeza desviado en el único remate claro que tuvo a centro de Moi Gómez desaprovechó la suya. Y Bryan ni siquiera tuvo opción de remate tras hincharse de balón y pecar de individualista en una jugada que provocó incluso una contra rival.

Al final empate a cero entre Valencia y Osasuna que no disgustó a ninguno de los dos entrenadores. Quizá más delito todavía del Valencia jugando en casa pero tiene que pesar lo de estar en descenso y de ahí lo de amarrar el punto. Daba la sensación que en los últimos minutos Baraja valoraba y mucho los 4 puntos de 6 ante Girona y Osasuna. Y Vicente Moreno tampoco quiso arriesgar consciente de que su primer punto lejos del Sadar tenía su valor y que sobre todo no quería conceder nada al Valencia por ir a por el partido. Con el punto, Osasuna a la espera que se juegue el resto de la jornada aunque tampoco va a variar mucho, es séptimo con 11 puntos, los mismos que el quinto, el Mallorca de Jagoba Arrasate o el sexto un Villarreal con un partido menos. Solo le puede superar en la tabla el Celta si gana en Balaídos al Atlético de Madrid.

Y el sábado otra vez de vuelta al Sadar. Esta vez Osasuna ante la prueba de fuego más seria de lo que llevamos de temporada. Llega a Pamplona el Barça, hasta ahora intratable en liga, con pleno de triunfos, 6 de 6 antes de recibir al Getafe. El líder de la liga ante el mejor local de la competición. El Barça pone a prueba la fortaleza rojilla en casa. Invictos en el Sadar, tres victorias consecutivas, 10 puntos de 12 posibles.