Osasuna brilla dando estopa al Barça en el Sadar

Pamplona

Osasuna firma una noche para la historia. Otra de esas citas mágicas en el Sadar. De las que se recordarán dentro de unos cuantos años. Justo 40 años después de aquel 4-2 al Barça de Maradona en 1984. Más de 12 años después de el último triunfo en Pamplona ante el Barça de Leo Messi. Ahora llega la goleada en 2024 para recordar al Barça de Lamine Yamal. Un partido casi perfecto. De esos difíciles de olvidar para la parroquia rojilla. Tanto para los que lo vivieron en directo en el Sadar, como para los que lo siguieron desde donde pudieran, incluidos los del concierto de Estopa casi a la misma hora en el Navarra Arena.

Un encuentro que Osasuna lo puso de cara casi desde el principio siguiendo el guion previsto. Control de balón para el Barça pero cada recuperación rojilla buscaba de forma vertical la meta rival. Un par de avisos de Areso, inconmensurable por su banda, primero intentando asistir a Budimir y después con un disparo cruzado rozando el poste, fue el preludio del primer gol. Por la izquierda apertura de Aimar Oroz para Bryan Zaragoza que tenía marcado el partido en rojo. El centro al corazón del área del extremo andaluz fue cabeceado al fondo de la red por Budimir superando a la imberbe pareja de centrales azulgrana.

Todavía se puso más de cara el partido antes del descanso con el 2-0. Robo de Torró en el centro del campo con el Barça reclamando falta, gran pase al hueco de Pablo Ibáñez y definición magistral de Bryan Zaragoza pisando el balón para irse del portero rival y marcar a placer. Bryan la volvía a liar casi un año después de nuevo ante el Barça como hiciera entonces con el Granada.

Dos cero al descanso y con opciones para ampliar la renta como un disparo acrobático que rozó el poste de Pablo Ibáñez y nada destacable del Barça antes del descanso. Las rotaciones del entrenador alemán Hansi Flick que llegaba a Pamplona con pleno de triunfos, 7 de 7 y los 21 puntos posibles parecían llegar a su fin y en el descanso puso a calentar toda la artillería pesada con los Lamine Yamal, Raphinha y compañía. Sin ellos todavía en el campo, Sergio Herrera fue capaz en un minuto de lo mejor y de lo peor. El meta burgalés consiguió salvar el gol de Lewandoski con un remate claro dentro del área y a continuación encajar uno de esos de tierra trágame. Saque precipitado al rival y cuando estaba reculando medio a trompicones se deja marcar un gol de esos para olvidar.

Momento crítico de partido con el 2-1 a los 7 minutos de la reanudación y con todo el arsenal ofensivo del Barça sobre el césped del Sadar. Reaccionó Osasuna con una ocasión clara de las que Budimir no suele perdonar y la réplica culé con Ferrán Torres plantándose tras una gran jugada individual ante Herrera que se desquitaba de su pifia anterior con otra gran parada. La tranquilidad la volvía a poner Areso con otra gran cabalgada por banda derecha asistiendo a Budimir que cuando se disponía a rematar fue objeto de penalti.

El croata no perdonaba la pena máxima marcando su gol de la noche, el tercero de la temporada y superaba a un mito como Jan Urban con su gol 46 en primera división con Osasuna. Solo Sabino Andonegui le supera ya a Ante. Pudo ampliar la renta Osasuna por medio de Peña y Raul García pero tuvo que ser Abel Bretones uno de los cambios el que desde la frontal enganchara un zurdazo que se colaba en las redes azulgranas a falta de 6 minutos para el final.

Todavía tuvo tiempo Lamine Yamal de dejar su huella en el Sadar con un golazo desde la frontal. La nueva estrella del Barça fijaba el 4-2 en el marcador que ya no se movería, idéntico resultado que hace 40 años ante el Barça de Maradona.

Cuarta victoria consecutiva del Osasuna invicto de Vicente Moreno en el Sadar. Espectaculares números de 13 puntos sumados de 15 posibles que sitúan a los rojillos, en la parte alta de la tabla. A la espera de que finalice el resto de la jornada 8, con los mismos 14 puntos que el cuarto, el Mallorca de Jagoba Arrasate en puestos Champions antes de visitar el sábado al Getafe de Bordalás.