"Hay que redoblar los esfuerzos": el 57,4% de las explotaciones agrarias de Navarra no tienen relevo generacional

Pamplona

Un 57,4% de las explotaciones agrarias de Navarra no tienen relevo generacional, mientras que el 37,6% tiene previsto realizarlo dentro de su familia y únicamente un 5% se lo plantea con alguien externo a su ámbito familiar, apunta, en La SER, el consejero de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, José Mª Aierdi. El consejero ha resaltado que el relevo generacional es una "apuesta fundamental para tener un futuro sólido en el sector agroalimentario" y para "mantener el mundo rural vivo". Por ello, ha incidido en la necesidad de "redoblar los esfuerzos para conseguir ese cambio generacional en el sector primario, eliminando obstáculos que impidan la incorporación de personas jóvenes y mujeres" y se aborden, también, "retos como favorecer el acceso a tierras".

Según ha apuntado, sólo el 18% de los profesionales titulares de las explotaciones tiene menos de 40 años. Una cifra que ha crecido un 3% en la última década frente al 11% de incremento de mayores de 55 años. Por otro lado, de las 2.305 explotaciones prioritarias registradas en 2023, un 11% están a nombre de mujeres, el 65,5% de hombres y el 23,4% de personas jurídicas. Asimismo, desde 2013, el número de explotaciones prioritarias ha disminuido un 17,2%.

"Es fundamental proponer nuevas acciones y herramientas de apoyo a la incorporación de nuevos agentes que den continuidad a las explotaciones, mantengan el empleo y la actividad económica" en las zonas rurales, ha subrayado.

Lur Berri

Así, ha explicado que las acciones del Plan Lur Berri, de relevo generacional en el sector primario, se centra en facilitar las nuevas incorporaciones, sobre todo de gente joven; "evitar el abandono de explotaciones viables", "hacer atractivo" el sector agroalimentario, "garantizar su viabilidad futura" y promover "modelos sostenibles de producción alimentaria".

Para ello, el plan se centra en cinco ejes: ayudas a las instalaciones, el relevo de explotaciones "viables" próximas a la jubilación, la recuperación de explotaciones en desuso, el "impulso de los espacios agrarios"; y la "formación y dinamización agraria".

El director general de Desarrollo Rural, Rubén Goñi, se ha encargado de desgranar algunas de las medidas previstas. Entre ellas, una prima a las instalaciones que parte de 40.000 euros pero que puede ascender hasta los 100.000 según diferentes condiciones.

Otra medida es la intermediación para facilitar el relevo generacional. Así, ya se han contactado con 12 posibles explotaciones "cedentes", principalmente del sector ganadero; y 14 posibles relevistas, en su mayoría de fuera de Navarra. A ello ha sumado la formación que se ofrece en INTIA y por la que han pasado 400 jóvenes en los últimos cinco años.

Asimismo, se están diseñando unas becas para 2025 que cubran los costes incurridos tanto por la persona cedente como por la nueva incorporación. Otras medidas pasan por la creación de un banco de tierras e infraestructuras para identificar explotaciones en desuso por falta de relevo o la creación de espacios 'test agrarios' en los que personas interesadas desarrollan una experiencia agraria a escala real por un período limitado, durante el cual evalúan el proyecto y, en su caso, realizan su primera instalación en esta misma explotación o en otra.

A ello ha sumado la Red Rural de Navarra "para aglutinar y generar sinergias entre diferentes agentes y visibilizar y fomentar la atracción de talento", la Escuela de pastoreo en el Pirineo, o la dinamización de centros de agroecología y visitas a explotaciones agrarias.