"Dicen, eso sí, que será con efecto retroactivo. Menos mal, pero a ver si llegan antes de que los chavales sean mayores de edad"

Pamplona

Le puso cifras concretas el barómetro de Cociudadana pero el problema ya lo denunció hace casi dos siglos Mariano José de Larra en aquel artículo que nos solían poner en exámenes de comentario de texto; lo del vuelva usted mañana.

Ahí Larra contaba la lucha de un amigo francés imaginario llamado Sans Delai (sin retraso) contra la burocracia. Bueno, pues dos siglos después, en la época de la inteligencia artificial, mejorar mejorar, pues lo justo.

Josean Echauri, psicólogo forense. Le llamamos ayer. Lo hicimos dos años después de que contáramos aquí en la SER la complicadísima situación en la que se habían quedado los hijos de una mujer asesinada por su pareja en el bar que ambos gestionaban en Pamplona. Prometió entonces el gobierno foral ayudas para este tipo de victimas colaterales que se quedan como se quedaron ellos. Iban a llegar en el 24, luego en el 25 y ahora en el 26. Taberna, vicepresidente, no cita a Larra sino a Gransci.

Dicen, eso sí, que será con efecto retroactivo. Menos mal, pero a ver si llegan antes de que los chavales sean mayores de edad. No vaya a ser que a la amiga burocracia le pete cabeza.