El profesorado de Religión que no da clase le cuesta a Navarra 2 millones por curso

Pamplona-Iruña

Dato que adelantamos en la SER; 2 millones de euros. Es lo que gasta el gobierno cada curso para pagar a profesorado que no da clase; el de religión. Una ley aprobada en 2022 por Navarra Suma y Geroa Bai obliga a mantener los contratos de este colectivo pese a que hayan reducido a la mitad su carga lectiva.

Son 111 las personas contratadas para dar religión en el sistema educativo pero actualmente hay carga lectiva para 68. Es decir, hay un excedente de 43 contratos pero como la ley de 2022 blindó sus contratos Educación está obligada a mantenerlos, con un coste de 2 millones 104 mil euros. ¿Qué hacen? Pues la asignación de tareas depende de las direcciones de los centros. Sí está claro qué no pueden hacer: No pueden dar otras materias ni ser tutores o tutoras de grupos, así que todo depende de los centros y a qué asignen la carga laboral a esas 43 personas. Desde que se aprobó esa ley para blindarlos ya se han jubilado 40 docentes y sus plazas no se han repuesto. En 2023 los partidos que firmaron el acuerdo para la segunda investidura de María Chivite incluyeron la derogación de esta ley, pero pasado el ecuador de la legislatura no hay noticia de que se haya redactado ni llevado al Parlamento.

Gasto de 2 millones de euros para no dar clase en un colectivo diferenciado del resto del profesorado; no pasan exámenes, ni opes, ni listas porque es el arzobispado quien los selecciona y el Gobierno paga sus nóminas.

Lo único que se les requiere es la declaración eclesiástica de idoneidad y estar bautizado como católico. Es el arzobispado el que la concede y exige no conocimientos de materias o pedagogía sino "recta doctrina y testimonio de vida cristiana". Quién decide cuál es esa recta doctrina? Pues el arzobispado, que también decide cuándo revoca esa declaración de idoneidad sin que la autoridad educativa tenga ningún papel. De hecho las plazas de profesor o profesora de religión católica en la educación pública para la Iglesia no son plazas sino "missio canonica", que es como designan en latín este cometido que les atribuye el Arzobispado.

Es la religión católica la que domina rotundamente estas clases. Aproximadamente la mitad del alumnado en ciclos obligatorios opta por la asignatura de religión. 37.200 reciben católica, 39 evangélica y sólo 30 islámica. También hay 67 estudiantes apuntados a Filosofía e historia de las religiones y 3 a la materia denominada Hecho religioso