Tres hombres solos

Este viernes cerramos oficialmente la cartelera de verano, que se ha debatido entre los superhéroes, las bodas y los alienígenas... para regresar poco a poco a la normalidad cinematográfica. El plato fuerte del fin de semana es 'Lo contrario al amor', de la que María Guerra dio buena cuenta el pasado martes tras su presentación, y a cuyo protagonista podréis escuchar esta tarde en 'La Ventana'. Sin embargo, hay otros tres estrenos que merece la pena reseñar y que parecen unidos por un nexo común: la soledad de sus protagonistas.

Si nos fijamos en la edad de esos tres hombres, podemos recorrer la cartelera en orden descendente. El cómico Gianni di Gregorio regresa hoy a la gran pantalla con 'Gianni y sus mujeres', una cinta que pisa las huellas de la vitoreada 'Vacaciones de Ferragosto' sin llegar a su nivel de hilaridad o de ternura. Y sin embargo se trata de una película solvente, en la que se nos muestran los debates internos de un prejubilado, de un hombre más cercano de la vejez que de la juventud, que se siente solo en el seno de su familia... y que anhela el amor de una mujer joven. Mención aparte merece su madre, la actriz Valeria de Franciscis, atinada en su papel de anciana que mezcla el despiste con el amor... y con las malas intenciones.

Un hombre de mediana edad, el segundo de nuestros protagonistas, vive solo en una lujosa casa de Los Ángeles. Se trata del hombre -no revelaremos la profesión, la procedencia o las motivaciones para no reventar la trama- que interpreta David Hyde Pierce y que recibe una extraña visita mientras prepara una cena para varios amigos en 'El perfecto anfitrión' [Nick Tomnay]. El doctor Niles Crane de la serie 'Frasier' abre la puerta de su domicilio y encuentra a un extraño viajero que le trae noticias de una conocida en Australia. A partir de ahí comienza una lucha física e interpretativa con reminiscencias de 'La Huella' de Mankievicz. Como en aquella película, los giros del guión no dejan de sorprender... a pesar de que el olfato de los espectadores se haya afinado mucho en los últimos 40 años.

Nuestro último hombre solo es mucho más joven. Está en la frontera de la veintena y la treintena, y se trata de un chico sueco de bajo estrato social -Joel Kinnaman, conocido por la serie 'The killing'- que quiere mejorar su nivel de vida. Para ello utiliza algunos métodos bastante poco ortodoxos, y se rodea de expresidiarios, mafiosos o toxicómanos que lo arrastran a ese término tan conocido: "una espiral de perdición". 'Dinero fácil' [Daniel Espinosa] engarza con las películas que reflejan las tripas podridas de las sociedades avanzadas, y particularmente la sueca, con 'Los hombres que no amaban a las mujeres' como último exponente reciente. Bien rodada, aunque narrada de forma un poco enrevesada.

Y con esto, como decimos, acaba el verano cinematográfico. Llegan Almodóvar y Malick, llegan los festivales de otoño... y en 'La Script' estaremos aquí para contarlo.