El caso del simio sabio: Simios que hablan
Los humanos solo comunicamos con voz al exhalar pero los simios también cuando inhalan y el chimpancé tiene más de treinta vocalizaciones diferentes.
Los primeros primatólogos y simiólogos intentaron enseñar a hablar a los simios con muy poco éxito. Después de seis años de entrenamiento intensivo a mediados del siglo XX, la chimpancé Viki sólo aprendió a decir bien mamá, y a medias papá y taza.Y además para la chimpancé mamá significaba en realidad comida. Cuando se concentraron en enseñar a los simios a utilizar lenguajes simbólicos y a leer y escribir, la situación cambió radicalmente. La chimpancé Washoe aprendió 160 signos, y cuando una ayudante pisaba una muñeca de Washoe, la chimpance usaba muchas formas de decirle lo que pensaba: «Arriba, Susan; Susan, arriba; mío, por favor, arriba; ¡venga, chica!, por favor, zapato; más mío; arriba, por favor; por favor, arriba; más arriba; chica abajo; zapato arriba; chica arriba; por favor, levanta».
Cuando adoptó al pequeño chimpancé Loulis, Washoe empezó a hacerle signos inmediatamente.Para esto no había sido entrenada. A los treinta y seis meses de ser adoptado, Loulis estaba usando veintiocho tipos de signos que había aprendido de Washoe. Después de cinco años de aprender a usar signos de Washoe y de otros dos chimpancés con esta habilidad, pero nunca de humanos, Loulis usaba cincuenta y cinco signos.
En los años ochenta se sucedieron las grabaciones en video de auténticas conversaciones con signos entre simios, que se enseñaban unos a otros y que practicaban sin humanos presentes.
Koko, una gorila ostentó hasta hace poco el récord de 300 palabras tras más de treinta años de convivencia con humanos. Koko usaba dedo brazalete para anillo; blanco tigre para cebra; ojo sombrero para máscara. Koko también comenzó a hablar de sus sentimientos internos, indicando felicidad, tristeza, temor y vergüenza.
Kanzi, un bonobo criado para la investigación del comportamiento, entiende dos mil palabras y cientos de lexigramas en ingles, inclusive frases. También juega en el ordenador.
Sin embargo y a pesar del esfuerzo por tratar de enseñar a los simios a comunicarse, hasta los más hábiles son superados en lenguaje por cualquier humano a los tres años. No así en memoria inmediata y otros aspectos.