Telegrama a David Petraeus

Telegrama de Miguel Ángel Aguilar a David Petraeus. General, cuando tantos servicios al país, en los lugares de mayor riesgo y fatiga, le habían convertido en el héroe preferido de la sociedad americana, ahora todo se viene abajo con estrépito por el amor de una biógrafa y su empeño descarado de ser su amante en exclusiva, ahuyentando con amenazas a las competidoras desde la dirección de correo electrónico del héroe, instalado ya en la dirección de la CIA. Por mucho que cunda la adoración a las nuevas tecnologías, vuelve a confirmarse la invariabilidad de la naturaleza humana, al menos desde Horacio en adelante. Ahí siguen la pasión amorosa y las vulnerabilidades que acarrea.