El caso sangriento: "El farsante Dexter"
el mayor experto en sangre del mundo de la ficción, el forense y asesino en serie, Dexter Morgan, conserva sangre de cada una de sus víctimas. Toma una gota de sangre, la coloca sobre un portaobjetos y la cubre inmediatamente con otro portaobjetos. Luego guarda la muestra en su colección en una caja de preparaciones microscópicas.
Esta forma de preparar la muestra de sangre es ridícula para cualquier investigador forense experto en sangre. Es un ejemplo de mala documentación, como tantos otros en el mundo de la ficción.
El frotis sanguíneo es una técnica utilizada desde hace mucho en el diagnóstico hematológico, y un experto no podría evitar realizarlo correctamente de forma mecánica, para poder ver con facilidad las células de la sangre. La gota de sangre se deposita siempre en un lado, no en el centro, y apoyando otro portaobjetos sobre el primero en un ángulo de unos 45 grados, se arrastra la gota de sangre. el resultado es una película sanguínea de color anaranjado.




