O sea, la culpa, de Chávez

Vamos hoy llenos de información internacional, y ni así dejan nuestros amigos de demostrarnos lo de derechas, pero muy de derechas, que son. Alguno parece muy contento con el golpe de Estado en Egipto, porque así se ha echado a los islamistas. No sé. ¿Nos parecen bien entonces los golpes de Estado militares si es para echar a islamistas, pero no si es para hacer lo propio con dirigentes católicos, por muy ladrones que sean? A La Razón le parece que está muy justificado lo que le ha pasado a Evo Morales. Y es que estos rojos de tres al cuarto es lo que se merecen, porque, claro, van provocando y luego no hay que sorprenderse de que alguien, un poco nervioso, los viole. Oigan: "El hecho, grave, de que tres capitales prefirieran dar más crédito a unas informaciones sin contrastar que a la palabra del presidente Morales debería llevar a la reflexión de hasta dónde conducen las salidas de tono, los insultos gratuitos y la retórica amenazante a que nos tienen acostumbrados los líderes del nuevo socialismo bolivariano". O sea, la culpa, de Chávez. Dice Isabel San Sebastián en Abc que fíjense ustedes, qué desastre, que la socialista Susana Díaz solo ha trabajado en política. Dónde vamos a llegar. Qué diferencia con Fátima Báñez o Ana Mato, una dilatada y brillante carrera en la empresa privada.