'El juego de Ender'. Disfruta lo que critiques

En el año 2070 la Tierra está en guerra con una raza de extraterrestres que tiene como objetivo exterminarnos. Ante la inminencia del desastre, los militares americanos reclutan y adiestran a niños superdotados para derrotar a lalienígenas. 'El juego de Ender 'es la adaptación de la novela del escritor americano Orson Scott Card, un clásico de la ciencia ficción juvenil que entra en los vericuetos de la manipulación psicológica y el dilema moral de un crio que podría ser empujado a causar un holocausto de toda una raza. La complejidad de la novela desde luego no alcanza a la película, que se queda en un panfleto militarista que invita a disfrutar de las batallas mientras cuestiona - muy débilmente, casi en susurros- la ética de la violencia. Es decir, que encarna el viejo pecado americano que querer imponer su justicia a golpe de disparos.  El gancho de la película es un reparto de superestrellas veteranas como Harrison Ford, Ben Kingsley, Viola Davis y los niños Asa Butterfield, el actor de 'La invención de Hugo'en el papel del torturado Ender, y la joven actriz de 'Valor de Ley', Hailee Steinfeld. Los actores mayores se limitan a hacer caja y  dar un recital de solemnidad, caras de palo  y discursos llenos de épica. Mientras,  los más jóvenes parecen autómatas dentro de un videojuego que enaltece el reparto de los roles machistas más casposos: ellos son guardianes del honor y ellas de los sentimientos maternales. Parece de chiste, pero en el lote de tópicos  los latinos cargan con el sambenito de violentos y poco cerebrales. María Guerra