Telegrama a Ruiz-Gallardón

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Señor Ministro de Justicia, en la rueda de prensa de Moncloa del viernes apareció desbordante de refinado cinismo y de sádica crueldad, al presentar la nueva Ley de interrupción del embarazo. Quería culpabilizar a los socialistas; erigirse en defensor de la mujer a la que incapacita para decidir; y exhibirse como estricto cumplidor de las obligaciones impuestas por Naciones Unidas. Su Señoría debería pasar las Navidades en algún centro de acogida a esos malformados, que sufren y hacen sufrir sin alivio posible, cuya condición de bien jurídico protegido cesa justo cuando nacen.




