La actitud de Osasuna destroza al Atlético de Madrid

Osasuna barre al Atlético de Madrid (3-0) gracias a los goles en la primera parte de Cejudo, Armenteros y Roberto Torres. El Cholo introdujo rotaciones y se encontró con un equipo perdido e irreconocible sobre el césped de un Sadar que acabó haciendo la ola, no obstante en ese campo no ha conseguido ganar ninguno de los tres primeros de la Liga BBVA.

El Atlético de Madrid ha sufrido en el Sadar su primera gran derrota de la temporada. Tras perder contra el Real Madrid en Copa y ante en Almería hace dos semanas, los de Simeone parecieron resucitar en San Siro, pero cuatro días más tarde, esta noche en Pamplona, las alarmas han vuelto a saltar en el Manzanares. El partido ante Osasuna es la primera gran derrota de la temporada. Perder ante el Real Madrid entra dentro de la lógico, no puntuar en Cornellà en un partido reñido y con un gol en propia meta se puede excusar, igual que el partido en Almería, donde entre el árbitro y Aranzubia el Atlético se volvió de vacío. En el Sadar fue diferente, por primera vez esta temporada el conjunto del Cholo fue irreconocible.

Contribuyó, y mucho, la actitud de Osasuna. Los navarros han puntuado en casa ante el Real Madrid (2-2), Barcelona (0-0) y al Atlético de Madrid (3-0), todo un ejemplo de la garra y la intensidad que aplican los navarros en cada gran duelo que disputan en su estadio. Mucho mérito es de Javi Gracia, que cogió a un equipo perdido en el camino de la permanencia y lo tiene en la mitad de la tabla mirando desde lejos la batalla por seguir en Primera.

El partido tuvo poca historia, desde el principio el Atlético era extraño, con tres delanteros -Villa, Diego Costa y Adrián-, sin Arda y sin Miranda. Lolo, Silva y Torres generaron superioridad constante en el centro del campo y mordieron a Atlético desbordado. En solo seis minutos llegó el primer gol local. Lo hizo a la salida de un córner en el que los navarros aplicaron la pizarra que tantas alegrías le había dado a Simeone. El córner lo sacó en corto Osasuna para Roberto Torres, que centró al segundo palo, justo al contrario al que había corrido, y arrastrado, los atacantes rojillos para dejar una autopista a Cejudo, que llegó desde fuera del área en carrera para rematar a placer el centro y colocar el primer gol.

El gol no produjo ningún tipo de reacción en el Atlético, perdido sobre el césped, desinterasado por un partido en el que se jugaba mantenerse arriba con el Real Madrid y dejar a tres puntos al Barça. Pagaron los colchoneros su actitud a un alto precio, el que les cobró Armenteros, pletórico de confianza. El extremo zurdo aprovechó un fallo en el despeje de Juanfran para lanzar desde la frontal un misil que se coló por el único lugar existente entre el poste y el guante del arquero Courtois.

El poco peligro que llevó el Atlético en la primera parte fue a balón parado. Mario Suárez se quedó a un pelo de rozar una falta lateral que podía haber acabado dentro de la portería de un Andrés Suárez ausente en el partido.

Sentenció el partido antes del descanso, abortando cualquier intento de remontada colchonera, Roberto Torres. Una combinación entre Armenteros y Damiá acabó en un centro preciso del canterano del Barça para Roberto Torres, que aprovechó la pasividad de Alderweireld y Godín para remtar al Atlético y alegrar al Real Madrid.

La segunda parte sobró, el físico de Osasuna aflojó y el Atlético de Madrid no reaccionó, solo la inercia de un equipo mejor técnicamente hizo que los del Cholo generasen ocasiones o, al menos, sensación de peligro. Para nada sirvió, el Sadar terminó el partido haciendo la ola y gritando con 'olés' los pases de su equipo, un conjunto que arrancó el Cholismo de un plumazo al Atlético de Madrid más irreconocible de la temporada. Lo único bueno es que los colchoneros pueden enmendar este error con una victoria de prestigio en el derbi ante el Real Madrid, el nuevo líder en solitario de la Liga BBVA.

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