La mano izquierda de Carlo Ancelotti

'El Pacificador'. A Carlo Ancelotti muchos le pusieron este sobrenombre de pacificador antes de desembarcar en Madrid. El vendaval Mourinho había dejado a todos exhaustos, incluido el presidente. El perfil que se buscaba era el de un hombre tranquilo, no sólo que no encendiese ningún fuego sino que también supiese apagarlos sin muchos aspavientos.

Hasta ahora, con el Madrid en la final de Copa, líder con tres puntos de ventaja sobre Atlético y Barça y en octavos de Champions, Ancelotti ha sabido mantener tranquilo este corral lleno de gallos y lidiar con cada uno de los culebrones que han surgido.

El primero, el del dueño de la portería, levantó mucha polvareda. Ancelotti tiró por la calle de en medio, tal vez por un motivo diplomático, para contentar a unos y a otros, o tal vez por uno deportivo, para mantener a los dos porteros a punto. Diego López juega la Liga y Casillas la Champions y la Copa. La elección, cuanto menos sorprendente, dio para muchos debates y especulaciones, que se fueron disipando con el paso del tiempo. De vez en cuando aún se le pregunta a Ancelotti si hay posibilidad de que cambie de portero. ¿Su respuesta? Una sonrisa socarrona y a otra pregunta.

El mismo criterio, el del reparto de minutos, ha tomado el italiano en el lateral derecho con Arbeloa, todo un veterano de guerra, y Carvajal, un recién llegado. El aragonés ha jugado apenas 200 minutos más que al madrileño. Tienen asumido, uno y otro, que un partido se juega y otro se descansa. Por ahora no hay problemas al frente.

El de Di María fue otro tema espinoso, posiblemente el que más por tener que ver con la afición, que el italiano supo solventar con bastante temple. Al argentino, rabioso por saberse con un papel secundario por aquellas -a comienzos de enero-, no se le ocurrió otra cosa que 'acomodarse' sus partes cuando el Bernabéu le abucheó en un cambio el día de Reyes. Un gesto que muchos, dentro y fuera del club, vieron como un desafío.

Algunos clamaban un castigo severo -varios partidos en la grada- y otros pedían que no vistiese más la casaca del Real Madrid. Ancelotti optó por dejarlo en el banco tres días después en el partido de Copa ante Osasuna, mandarle calentar a la banda para que escuchase el plebiscito del Bernabéu, y devolverlo al banquillo. El siguiente partido en el feudo blanco, a finales ya de mes, Ancelotti ya había encajado al 'Fideo', al lado de Modric y Xabi Alonso, en ese sistema 4-3-3 que tanto gusta al italiano últimamente y que tan buenos resultados le está dando.

Ancelotti va esquivando cada charco que se le presenta en el camino. Alguno con algo de suerte. El buen hacer de Jesé en lo que va de curso ha creado un debate. ¿Jesé o Bale? Las lesiones del galés le obligaron a estar fuera varios partidos. No tuvo Ancelotti que elegir. Y en estos tres últimos partidos de Liga, con Cristiano en la grada por sanción, jugaron ambos. Jesé por la banda izquierda y Bale por la derecha. Con la vuelta del portugués, Ancelotti tiene que decidirse. "El que no juegue en Champions el miércoles, lo hará el domingo en el Calderón", dijo la semana pasada. El elegido ante el Schalke es Bale, así es que el canterano será el que juegue de inicio en un envite decisivo para el devenir de la Liga ante el Atlético de Madrid.

La plantilla, en general, está encantada con este hombre tranquilo, que manda sin gritar y sin hacer aspavientos. Aunque hay dos jugadores con el ceño fruncido. Isco lleva muy mal ser un secundario. Con pocas palabras y mucho desdén el malagueño ha hecho algún que otro feo a Ancelotti, que mira para otro lado y sigue su camino. Otro enfadado es Morata que ya forzó su salida en Navidad, aunque Ancelotti fue taxativo. No habría salidas en el mercado de invierno. Y a otra cosa. Por ahora a Ancelotti y al Real Madrid les va muy bien con ese talante comedido y esa mano izquierda del italiano.

'El Larguero' | 'Carrusel' | 'SER Deportivos' | 'Hora 25 Deportes' | 'Play Fútbol' | 'Play Basket' | 'Punto, SER y partido' | Seis Naciones | Fórmula 1 | Más deportes