La realidad no es lo que parece

Madrid

La lectura de la prensa esta mañana nos vuelve a recordar que las apariencias engañan...

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"No soy un vago", clama Antonio López en El País ante las críticas de que haya tardado 20 años en pintar el retrato de la familia real encargado por Don Juan Carlos. El pintor manchego aclara que durante este tiempo ha seguido trabajando en otras muchas obras y que el cuadro expuesto desde ayer podría haber tardado en hacerlo sólo unos meses, si no le hubieran paralizado los trajes de la reina y las Infantas y que hacía mucho que no "trabajaba con personas". En el retrato, analiza Marius Carol en La Vanguardia, "los peinados y los vestidos parecen de otra época. Es más: incluso el soberano ha dejado de serlo. Más que un cuadro es una imagen congelada de España". Un país más luminoso y optimista, a juicio de Antonio López que ve ahora mucha suciedad en el arte porque el artista solo describe lo que ve. "Si me pregunta por España, dice, creo que hasta la mierda no nos asfixie y se acaben los espacios de tranquilidad, no tocaremos fondo, única manera de renacer".

Y para renacer hace falta combatir la corrupción...

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Vivimos en "el reino de la corrupción" como lo define Jesús Ceberio en la Cuarta Página. El antiguo director de El País estima que "los cambios legislativos han mantenido intacta la corrupción estructural para financiar a los partidos, a la que se ha sumado el creciente pillaje individual". "A un año de las elecciones, los partidos no pueden cruzarse de brazos" a menos de seguir alimentando a Podemos que amenaza a un bipartidismo asfixiante. De momento, "los jueces piden leyes más duras contra la corrupción" señala El Mundo que editorializa sobre un gran pacto por la Justicia en el que los partidos deberían dejar al margen la lucha partidista porque sin una justicia eficaz es impensable una regeneración de la democracia". En este sentido, El País avanza la iniciativa del gobierno para limitar a seis meses las investigaciones judiciales que será presentada mañana en el Consejo de Ministros.

Con un ojo puesto en la reunión del BCE, los analistas internacionales siguen pendiente del petróleo...

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"Miedo al agujero negro que puede causar la pérdida de 316.000 millones de dólares por parte de la OPEP", assegura en primera el diario de la City que, en páginas interiores, analiza la situación sensible para China que, por un lado, se beneficia de la reducción del precio en su industria pero también pierde por ser el cuatro productor mundial. "Rusia, Irán, Venezuela, Argelia y Nigeria ven como su economía se ve desetabilizada por la bajada de los ingresos por hidrocarburos" precisa le Monde. Son los grandes perdedores entre los productores. ¿También los consumidores? Vidal Folch en El País plantea una cuestión de perogrullo: si el precio del petróleo se abarata un 40% y el de la gasolina sólo un 8,4%, es que el saldo va al oligopolio y por tanto no beneficiará a la economía real.

Una muñeca "muy real" también llama nuestra atención...

Lammily tiene algo de barriga, las caderas anchas y las piernas no son palillos. Es la anti-Barbie, como proclama su creador en La Vanguardia que analiza la muñeca como complemento a un repotaje sobre la anorexia. Entre los accesorios de Lammily, una página con pegatinas realistas con tiritas, granitos, celulitis, estrías... Claro que si Barbie existiese y tuviese un tamaño real mediría dos metros, tendría 40 centímetros de cintura, 135 de pecho y casi no podría andar. Las apariencias, como decíamos al principio, engañan...

El tuit de esta mañana, Patiño, habla de cómo mejorar el lugar de trabajo...

En concreto para los que trabajamos en oficinas. Un estudio que hoy publica el Handelsblatt demuestra que "llenar la oficina de plantas aumenta la productividad". Además, "el verde natural aumenta la motivación, la salud y la ética en el trabajo"... Allá va...