Una portada española para el homenaje del 'New Yorker'

Barcelona

“Siempre piensas que es muy simple, pero depende de cómo lo cuentes”. Así define su trabajo Ana Juan la ilustradora cuyo dibujo ha sido elegido por The New Yorker para ocupar la portada de su nuevo número en homenaje a los trabajadores de Charlie Hebdo asesinados el pasado miércoles. Esta mañana Gemma Nierga ha hablado con ella en 'Hoy por hoy'.

“Era para una galería de imágenes para la web, pasó a una ilustración para interior y de repente anoche me encontré con que era la portada” explica Juan, nacida en Valencia y que colabora con la prestigiosa revista americana desde 1995. El dibujo de una Torres Eiffel, culminada por la punta de un lápiz, servirá para abrir la edición del próximo lunes del magazine. Pero no es la primera vez que The New Yorker elige una ilustración de Juan. Hasta 20 portadas, entre ellas la del décimo aniversario de los atentados del 11-S, llevan su firma. Pero esta es la primera plana que nunca querría haber dibujado. “Esto no tenía que haber pasado” explica Juan. “Que tengas que llegar a hacer esta portada… ¿Por qué este absurdo?” se pregunta esta ilustradora afincada en Madrid. Son días especialmente sensibles para los artistas gráficos. “Lo único que podemos hacer es seguir adelante intentado no perder todo aquello que hemos ganado durante los años, que no volvamos a la edad media”.

No era su dibujo favorito

Curiosamente, esta ilustración no era la favorita de las que Ana había presentado a la revista. “Como siempre no. Yo incluso la hubiera resuelto de otra forma” explica la ilustradora. En una de ellas jugaba también con la torre Eifel “algo más abastrato” y otra era “simplemente un lápiz que había perdido la punta.

Crisis en el sector de los ilustradores

Estos días que, debido a los tristes hechos acaecidos en París, no se para de hablar de dibujantes, ilustradores y humoristas gráficos, conviene recordar también las condiciones laborales a las que se enfrentan. Ana Juan recuerda los recortes en cultura: “La gente ha tenido que bajar los precios, se empieza a abusar de ellos. Como en todos los sectores”. Mientras los recortes lo permitan, seguramente seguiremos disfrutado de las ilustradores de Ana Juan en cuentos, libros, y revistas como The New Yorker, recordándonos el poder que tiene, o al menos debería de tener, un simple lapicero.