Hezponja: Esponja putrefacta
Luis Piedrahita nos ayuda a encontrar nombre para aquello que todavía no lo tiene

Madrid
Hay cosas que no tienen nombre. Un vestido de novia con riñonera, ¡eso no tiene nombre! Y eso pasa porque las palabras son escasas como bolsillos en vestido de novia. Hay conceptos que no tiene un palabra que los designe. Por este motivo, Luis Piedrahita nos ayuda a ampliar nuestra lengua en 'Todo por la radio'
A lo largo de esta temporada, hemos aprendido gracias a él, que la papada que cuelga de los brazos de las señoras se llama 'braciblub', que los negocios corruptos son 'negrocios' o que el exceso de atención, aquellos que nos hacen demasiado el pelota, nos 'empahalagan'
En 'Todo por la radio' ampliamos nuestro particular diccionario de las cosas que, por fin, tienen el nombre que se merecen.






