¿Seguridad local frente a amenaza global?

Madrid

Los gobiernos de Alemania, Francia, hoy mismo el de España, van desgranando las reformas legales antiterroristas que afrontan tras los atentados yihadistas de París. Es exigible que se mantenga el equilibrio entre el reforzamiento de la seguridad y el respeto a las libertades y esa es tarea del parlamento y, en su caso, del Tribunal Constitucional si se sobrepasasen algunas líneas rojas.

Pero lo que resulta discutible es que estas medidas se vayan adoptando a nivel local cuando la amenaza es global sobre un ámbito de libre circulación como es la Unión Europea. Es verdad que los ministros de Interior pactaron en París el espíritu de esas reformas, pero la letra y los instrumentos precisos, así como los recursos también deberían ser comunes. Si hemos pactado la trazabilidad de los alimentos también deberíamos ser capaces de fijar la trazabilidad del terror y ser firmes no sólo contra los lobos solitarios sino contra los estados que los amparan y los financian y con los que seguimos haciendo negocios después de dictar nuevas leyes antiterroristas.