Héroes nacionales
Ni en el mejor de nuestros sueños esperábamos estar en esta situación: semifinales y a un paso de la gloria, que con el apoyo de nuestro pueblo seguro podremos alcanzar
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El jugador de Guinea Ecuatorial, después de marcar en el partido de cuartos de final. / AMR ABDALLAH DALSH Reuters
Guinea Ecuatorial
El sueño continúa y parece no tener fin. De nuevo saboreamos la gloria y el éxito en una noche mágica en Bata, en la que conseguimos remontar ante Túnez y clasificarnos para las semifinales de esta Copa África. Con lucha, esfuerzo y mucho sacrificio como no podía ser de otra manera y, eso sí, con un golazo tremendo de Javi Balboa, que ha entrado por la puerta grande en la historia del fútbol ecuatoguineano. La fiesta en el vestuario fue tremenda: la celebración duró más de una hora con la llegada de muchísimas personas que nos querían agradecer esta victoria.
El reconocimiento no solo nos llega de nuestros aficionados, que nos paran cada dos por tres por las calles para darnos las gracias, también lo ha hecho el Gobierno del país. Este lunes nos recibieron en el Parlamento y fue muy emotivo el discurso del Presidente del Gobierno, que nos calificó como héroes nacionales y le enorgullecía cómo estábamos defendiendo la bandera de Guinea Ecuatorial en esta Copa África. El aplauso cerrado de todo el Parlamento es algo que no olvidaré nunca.
En lo personal, me encuentro en el mejor momento de mi carrera. Es un campeonato que no voy a olvidar jamás. No solo porque el seleccionador Esteban Becker me está dando la confianza y galones para mover al equipo, también porque he visto recompensado el esfuerzo siendo seleccionado en el mejor once de la fase de grupos de esta CAN. Es un orgullo tremendo estar entre los mejores futbolista del continente.
El jueves es el gran día, a las 8 de la tarde nos enfrentamos a Ghana por un puesto en la final. De nuevo ante un rival muy superior, si no el mejor y más temible equipo que puede haber ahora mismo en África, pero nosotros ya no tememos a nada, ni al cambio de sede. Hemos dejado Bata, nuestro punto de concentración, entrenamientos y victorias que tantos éxitos y suerte nos ha dado. Estamos en Malabo para jugar esta semifinal, pero confiamos en volver a Malabo el domingo para luchar por el título en la gran final. Nosotros no vamos a dejar de soñar...
