¿Qué le pasa a la izquierda?
Las negociaciones para constituir ayuntamientos y parlamentos autonómicos está evidenciando la dificultad que tiene la izquierda para llegar a acuerdos.

GRA155. SEVILLA, 09/06/2015.- La presidenta de la Junta de Andalucía en funciones, Susana Díaz, y el líder de Ciudadanos, Juan Marín, se saludan al comienzo de la reunión mantenida hoy en el Palacio de SanTelmo en Sevilla, sede del ejecutivo, donde contin / Julio Muñoz (EFE)

Madrid
Las negociaciones para constituir ayuntamientos y parlamentos autonómicos está evidenciando la dificultad que tiene la izquierda para llegar a acuerdos. Que Susana Díaz haya encontrado en Ciudadanos una muleta que podría haber hallado en un ámbito ideológico más cercano, que en Madrid Carmena y Carmona tengan discrepancias de última hora por cuestiones de formas y, sobre todo, que la ruptura de conversaciones entre PSPV y Compromís en la Generalitat pueda facilitar que Rita Barberá repita como alcaldesa, son ejemplos del mal.
Durante lustros la izquierda no ha podido gobernar en Madrid y Valencia, a pesar del barrizal de corrupción, porque los electores les dieron la espalda. La circunstancia ya les tendría que haber hecho reflexionar. Pero si ahora que los votantes han señalado un camino que facilitaría gobiernos de izquierdas sus dirigentes no son capaces de acordar, quizás deberían cambiar definitivamente los escaños de las instituciones y pedir hora en el diván del psiquiatra.




