La vida privada de los otros
No hay pudor a la hora de especular para mantener el interés

Madrid
Hay una industria basada en la vida privada de los otros. La ejercen periodistas a los cuales les asustaría que fueran expuestas sus propias vidas privadas. Usan artimañas para buscar sus informaciones y no tienen pudor a la hora de especular para mantener el interés sobre lo que no debería interesar sino a los afectados. Se sirven también de unidades móviles y de una alta tecnología que en muchos casos son de las televisiones públicas que pagamos todos. Frente a eso sólo cabe la resignación de los afectados, y esta es una situación vergonzosa que sí merecería la atención de los poderes públicos.




