“La radicalización de los nuevos yihadistas antes requería años, ahora semanas”

Madrid

El secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, considera que “tenemos que ser razonablemente optimistas en la lucha contra el terrorismo” aunque la lucha sea complicada. “Hay un gran consenso internacional para frenar a los yihadistas”.

Cree que hay que moverse en “el plano de la transparencia, la prudencia y el realismo sereno sobre el nivel de amenaza para que no nos haga caer en el alarmismo pero tampoco un una falsa calma”. Pide dejar trabajar a los expertos, que en estos momentos recomiendan al Gobierno “mantener el nivel de alerta 4”.

Preocupa sobre todo la capacidad de captación del Estado Islámico a través de internet. “Por primera vez una organización terrorista se ha dotado de un instrumento de propaganda como nunca antes habíamos visto”.

Constata el secretario de Estado que la mayoría de nuevos yihadistas en Europa son captados a través de las redes sociales. Su perfil: “Jóvenes desarraigados que no han conseguido adaptarse a sus países y que ven en los mensajes de DAESH una bandera llena de atractivos a la que adherirse”.

Francisco Martínez pone también el acento en la rapidez con la que estos jóvenes se suman a la causa del Estado Islámico. “En muy poco tiempo, en semanas, se convierten en fanáticos que se desplazan a zonas en guerra o que se quedan en su lugar de residencia para actuar como lobos solitarios”.

Destaca que la lucha antiterrorista también se tiene que hacer dentro de las cárceles, donde se suelen dar casos de radicalización. “Los funcionarios de instituciones penitenciarias tienen experiencia en identificar a quienes tratan de captar terroristas”, asegura.

Cree que es necesario trabajar en la reinserción de los terroristas retornados de países en conflicto y que el testimonio de muchos de ellos, “desilusionados con el Estado Islámico”, es la mejor arma contra el yihadismo.