“La zona de rescate es un no parar”
La jefa de misión de MSF señala en la SER las dificultades a las que tienen que hacer frente para asistir a todos los inmigrantes que con el buen tiempo tratan de cruzar a Europa

Un grupo de inmigrantes trata de llegar a la costa italiana / EFE

El Mediterráneo, con buen tiempo, se llena de embarcaciones de todo tipo repletas de inmigrantes que intentan llegar a Europa. Este mismo domingo Italia rescataba a más de 700 inmigrantes.
“La zona de rescate es un no parar”, explica Paula Farias, jefa de misión para el Mediterráneo de Médicos Sin Fronteras. “No damos abasto”, señala Farias, que explica que cuando recogen una embarcación tienen que llevar a los inmigrantes a puerto y tardan dos días.
Médico Sin Fronteras tiene tres barcos operando en la zona pero cuesta atender a todos. Su trabajo, coordinado desde Roma, evita que se produzcan grandes catástrofes como la que provocó la muerte de más de 700 personas en abril. “Las condiciones es las que viajan son tremendamente precarias, son embarcaciones de goma que si se pinchan se hunden de golpe”, asegura Farias. “Tienen poca certeza de llegar a la costa”, explica. Muchos de ellos viajan con teléfonos con los que avisar a las autoridades cuando se encuentran en problemas. “Sicilia ya está desbordada”, explica la española. “Roma ya está desviando embarcaciones a otros puertos del sur de Italia y desde allí se recolocan en otras ciudades, algunas del norte”, añade.




