Retos de rutina

Volver de las vacaciones supone todo un esfuerzo que muchos tratan de atajar fijándose nuevos retos y metas. Apuntarse a un gimnasio, aprender nuevos idiomas o proponerse la obtención del carnet de conducir son alguno de los propósitos más habituales que muchos apuntan como objetivos necesarios para cumplir durante lo que queda de año.

Con las pilas cargadas después de trabajar durante el verano, pero compaginado con pequeños ratos de ocio, Sara quiere comenzar ya un gimnasio “una meta de septiembre que quiero empezar con fuerza” y que le permite distraerse de la cotidianidad. También lo cree así Claudia, que enfoca sus esfuerzos en “gimnasio y mejorar el inglés” porque “nunca sobra” ampliar los conocimientos en esta lengua.

Para otros como José, los retos posteriores al verano se diluyen entre las actividades que normalmente realiza durante su año universitario: “no hago nada diferente; solo me dedico a estudiar informática y no me voy a estresar. Lo que ya tengo y ya está”.

Aunque equilibrando la balanza, otros apuntan hacia retos más grandes más allá de las fronteras. Es el caso de Jimena, que quiere salir de Madrid “para cambiar de aires” y empezar con “nuevos retos profesionales”.

Más allá de propósitos, parece que lo que no está claro es mantenerlos en el tiempo. Claudia cree que siempre “llega el momento en el que el trabajo puede más que la vida de ocio”, una tesis que apoya Sara, aunque mantiene un hilo de esperanza: “si no se puede durante septiembre, siempre nos quedará fin de año para volver a retomar los objetivos”.