Un médico español reaparece en Italia tras 17 años desaparecido
Le habían declarado ya muerto, pero un médico español que desapareció con 26 años, ha estado viviendo los últimos 20 como un ermitaño en una tienda de campaña en la Maremma, una zona que se asoma al mar entre Violina y Scarlino en Italia
Madrid
Carlos Sánchez Ortiz de Salazar tiene ahora 46 años y desapareció hace 17 de Sevilla donde vivía . Unas personas lo localizaron hace 15 días en una zona costera de Italia viviendo como un ermitaño en una tienda de campaña, según cuenta el diario italiano Corriere della Sera.
Llevaba un carnet de una biblioteca española y otro de la Facultad de Medicina de Sevilla. A través de una asociación de desaparecidos, Penélope y de la española SOS desaparecidos, se contactó con la familia que no tenía noticias de él desde abril de 1998 y a quien ya habían declarado muerto.
Los vecinos de la zona donde vivía le habían visto merodeando por allí desde hace seis años, y lo definen como una persona pacífica que no era muy dada a conversar.
Los padres de Carlos se trasladaron a Italia nada más conocer la noticia de su aparición, pero no han podido hablar con él, porque ha vuelto a desaparecer. Los familiares han declarado al diario que: “es nuestro Carlos, está vivo y eso es lo que importa. Nosotros respetaremos su voluntad y su libertad, aunque esperaremos a que vuelva para poder abrazarlo aunque solo sea un momento”.
Esta historia muestra una mezcla de la desesperación de los padres por la pérdida de su hijo, y la supervivencia de un hombre, ex psiquiatra, que huyó de su casa a los 26 años y que durante los últimos 20 ha decidido vivir como un ermitaño, un maquis en la Maremma, en una zona impenetrable que serpentea por la cala Violina y las colina de Scarlino. Hectáreas y hectáreas de terreno que han escondido a Sánchez Ortiz de Salazar.
Ha vivido alejado de todo el mundo, sin acercarse a la civilización y sin hablar con nadie. Hace unos días, dos buscadores de setas le habían sorprendido en su tienda de campaña en la parte mas inaccesible de la selva. El mismo les dijo:” soy español, mi nombre es Carlos y vivo aquí desde hace 20 años. Ahora tengo que volver a marcharme”, tras enseñarles el pasaporte que los buscadores de seta consiguieron fotografiar.
Iniciaron entonces una búsqueda por Internet que les llevó a la asociación Penélope de familiares y amigos de personas desaparecidas y la homóloga española SOS desparecidos. Allí localizaron los datos de Carlos, y se le informó a la familia. Su padre, de 68 años y ex trabajador de la construcción, y la madre, Assunta, de 65 ama de casa, explicaron el drama de todos estos años y la felicidad de poder ver a su hijo.
De momento no ha habido suerte, porque Carlos ha vuelto a huir. Su familia ha agradecido a las asociaciones, y a los que encontraron a su hermano, y aunque no hayan podido verle, están felices de que se encuentre vivo.
Victoria García
En la SER, desde hace casi tres décadas, con algunas ausencias. Antes en Antena3 Radio y TV. Trabajé...