¿Y si cambiamos el sujeto de la violencia?
"Pensemos en una violencia inversa en la que ellas fueran las asesinas y ellos, los asesinados. Y ahora imaginemos la reacción y preguntémonos si sería exactamente la misma. La respuesta es no."
Madrid
Cada año son asesinadas en España una media de 60 mujeres por el hecho de ser mujeres. La estadística se repite como un mantra inexorable a pesar de lo hecho para combatir esta violencia, que ha sido mucho. Y por eso hay que preguntarse si estamos actuando a la altura de las circunstancias. Les propongo cambiar el sujeto. Supongamos que en vez de 60 mujeres asesinadas por ser mujeres fuesen 60 políticos, periodistas, farmacéuticos, sacerdotes, futbolistas, sindicalistas… los asesinados cada año por el mero hecho de serlo. Es más, pensemos en una violencia inversa en la que ellas fueran las asesinas y ellos, los asesinados. Y ahora imaginemos la reacción y preguntémonos si sería exactamente la misma. La respuesta es no.
La violencia machista es un terrorismo sin estructura difícil de combatir. Seguramente el riesgo cero será imposible de conseguir. Pero decenas de mujeres asesinadas cada año, decenas de miles protegidas de su maltratador y otras tantas que aún malviven con sus hijos e hijas bajo el mismo techo que el potencial asesino son la muestra de que no se está haciendo lo suficiente o lo conveniente.
