"Deberíamos tratar esta emergencia con muchísima más humanidad de lo que lo estamos haciendo"
El frío y la llegada del invierno dificultan aún más la situación de los refugiados que llegan a Lesbos huyendo de la guerra siria. En la isla griega se encuentra nuestro compañero Nicolás Castellanos
Pedro Armestre/Save the Children
Madrid
Según datos de la Organización Internacional para las Migraciones, casi 900.000 refugiados e inmigrantes han entrado este año en Europa, principalmente a través de Grecia y la ruta de los Balcanes, en la que se considera la mayor ola migratoria registrada en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Ni siquiera el frío y las malas condiciones climatológicas frenan sus intentos de llegar a Grecia a través de la isla de Lesbos. Una isla de apenas 80.000 habitantes por la que ya han pasado en este 2015 430.000 personas huyendo de la guerra. Allí se encuentra nuestro compañero Nicolás Castellanos.
Hemos podido hablar con Chiara, voluntaria italiana que actúa como mediadora cultural para la organización 'Save the Children' en uno de los campos de refugiados de Lesbos donde han establecido un 'safe space', un lugar dedicado a los más pequeños al que "llegan con muchas ganas de divertirse y jugar, de hacer cosas que hace mucho tiempo que no hacen"
Junto a Pino González hemos podido conocer más de cerca el trabajo de Médicos del Mundo, una de las ONGs que se han desplazado hasta allí para prestar ayuda a los centenares de personas que llegan cada día a la isla. Deben enfrentarse a una "emergencia diferente a las que hemos vivido en la última década", atendiendo a quienes llegan mojados, tiritando de frío, con hipotermia e hipoglucemias producto del viaje hacia un futuro mejor, pero nó solo tratando heridas físicas ya que también "hay que tener muy en cuenta las heridas psíquicas y psicológicas que conlleva este tipo de éxodo, viajan con mucho miedo"
