“La familia prefiere verla muerta antes que soltarla”

Madrid

“La familia prefiere verla muerta antes que soltarla”. Así de tajante se ha mostrado un conmocionado Ismael Arregui, el marido de Maloma, la saharaui de 22 años residente en Sevilla que fue retenida el pasado mes de diciembre por su propia familia biológica, cuando viajó al Sáhara Occidental precisamente a visitarles. Han pasado 50 días desde que Maloma tendría que haber regresado a Mairena de Aljarafe, donde vive desde los 12 años. ¿Por qué no se le pregunta a Maloma si quiere volver o no? ha cuestionado Arregui esta mañana en Hoy por Hoy con Gemma Nierga, donde ha solicitado a las autoridades que les ayuden a su liberación.

“Ayer nos confirmaron que está en territorios liberados y la única autoridad competente e interlocutor válido es el Frente Polisario”, ha contado Arregui, que igualmente ha pedido ayuda al Ministerio del Exterior y al Consulado. “Si el Frente Polisario fuese capaz de trasladarla a los campamentos de refugiados de nuevo, sí se podría hacer una misión diplomática y acudir allí”, ha añadido.

Maloma viajó al campamento de refugiados de Tinduf del 5 al 12 de diciembre para visitar a su familia y, poco antes de volver, su hermano mayor y sus dos primos la secuestraron. Hasta el 25 de ese mismo mes su familia adoptiva pudo contactar cuatro veces con ella por vía telefónica, pero desde entonces no han vuelto a saber nada de ella. “Cuando hablaba con nosotros nos decía: “No os olvidéis de mí”, “Si me quedo aquí, me muero” y a su madre le dijo textualmente “Mi hermano me ha secuestrado”, ha recordado Arregui.

El marido de la saharaui está convencido de que su mujer se encuentra retenida en contra de su voluntad, pero ha asegurado que si ella le dijese en persona que se quiere quedar con su familia biológica, él la respetaría y lo aceptaría. “Hemos pedido una visita diplomática con seguridad para verla, que note nuestro apoyo y para saber qué es lo que quiere ella, porque sin verla no sé si está coaccionada o no”, ha explicado.