¿Pueden los padres entrar en las redes de sus hijos?
"Parece sensato que la hiperprotección de la intimidad no pueda crear espacios en los que el acosador actúe impunemente. Pero la línea es extremadamente fina"

Ricardo Pérez-Solero (EFE)

Madrid
Una mujer entró en el perfil de Facebook de su hija menor ante la sospecha de que estaba siendo acosada. Gracias a eso la policía detuvo al individuo, que fue condenado por abusos. El delincuente recurrió ante el Supremo porque las pruebas habían sido obtenidas ilícitamente. El Alto Tribunal ha sentenciado que, en este caso, el fin justifica los medios.
Sostienen los jueces que, entre el derecho a la intimidad y el deber de los padres de proteger a sus hijos menores, la privacidad "puede ceder" si están en juego otros intereses constitucionalmente protegibles", porque si los padres tienen la obligación de velar por sus hijos no se les puede quitar la capacidad de intervenir en casos como este. Parece sensato que la hiperprotección de la intimidad no pueda crear espacios en los que el acosador actúe impunemente. Pero la línea es extremadamente fina, porque no sabemos lo que sentenciaría un tribunal si la sospecha de la madre vigilante finalmente no se confirma.




