Secretismo inaceptable

Madrid

Teníamos motivos para recelar. La revelación de Greenpeace Holanda sobre los acuerdos que están negociando Washington y Bruselas en el Tratado de Comercio Transatlántico lo demuestran. Se han filtrado 248 páginas de estas negociaciones y ocurre lo que se temía: que Estados Unidos está apretando las tuercas a Europa para alterar normas clave en materia de salud y de medio ambiente en beneficio de los intereses de las grandes corporaciones.

Algunos ejemplos: los americanos quieren que se eliminen las actuales exigencias preventivas para asegurar que no es dañino un producto antes de salir al mercado. Los americanos quieren sustituirlo por el principio de 'Prioridad la comercialización. Si es dañino que se vea luego'. Así mismo, quieren rebajar exigencias para productos químicos, pesticidas o modificados genéticamente. Y es muy determinante también que, para dirimir discrepancias, donde Europa exige tribunales, Estados Unidos quiere simple arbitraje técnico. No sabemos qué está pudiendo o queriendo poner Europa en todo esto, porque lo que hay que denunciar es el actual secretismo de las negociaciones, que es inaceptable por razones democráticas y de simple dignidad.