Desperdicio alimentario: ¿cómo evitarlo?

Madrid

Hábitos tan cotidianos como comprar excesivamente sin poder aprovechar los alimentos en los próximos días; olvidar las sobras en la nevera; imprevistos que nos impiden comer en casa, olvidando los alimentos de ese día; cocinar en exceso o sobrecargar platos en eventos o comidas familiares, cuyo destino final es la basura; confundir las fechas de consumo; quitar importancia a los alimentos entregados gratuitamente en bares y restaurantes que no vamos a consumir, etc… Un sinfín de hábitos que conllevan a aumentar el cubo de la basura con alimentos aptos para el consumo. ¿Podíamos evitarlo?

Han pasado más dos años desde el primer "Estudio sobre el desperdicio de alimentos en los hogares españoles" realizado por HISPACOOP, donde se mostraba que en España se desperdiciaba alrededor de un millón y medio de toneladas de alimentos (1.521.066 T). Según este estudio, cada hogar estaba desperdiciando más de 76 kg y medio de alimentos al año, lo que implicaba que por persona tirábamos a la semana más de medio kg de alimentos (esto es, más de 32 kg de alimentos desperdiciados por persona al año).

Con los recientes datos del 2016 presentados por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, según el Panel de cuantificación del desperdicio alimentario, la situación apenas ha variado, detectándose una pequeña reducción de la cantidad global desperdiciada por los hogares españoles, concretamente, 1.325,9 millones de kilos de alimentos al año, siendo una media de 25,5 millones de kilos de alimentos desechados semanalmente por los hogares españoles.

Una de las causas de esta reducción ha sido el cambio de comportamiento del consumidor español, que cada vez está más concienciado con el problema. Pero sin lugar a dudas la crisis sufrida en España es la que ha marcado estos cambios. Muchas familias de nuestro entorno se han visto afectadas, por lo que consumir alimentos y aprovecharlos ha sido una prioridad. Con la crisis, todos estamos más sensibles, y consideramos que alimentarse constituye una necesidad básica.

Pero ¿hasta qué punto damos valor a los alimentos? ¿Cómo afecta a nuestro bolsillo el simple hecho de desperdiciar alimentos? ¿Cuánto dinero estamos tirando en realidad? Con las cifras anteriormente aportadas, se estima que cada español está desperdiciando una media de 250 euros al año por comida que no ha usado o consumido. Lo peor es que más del 45% de esta comida que se ha desperdiciado era evitable, si hubiéramos adoptado hábitos responsables. Lo cierto es que al desperdiciar estos alimentos aptos para el consumo estamos gastando nuestro dinero sin apenas darnos cuenta. Cabe preguntarnos si realmente estamos dando la importancia que se merece a los alimentos, o por el contrario no tienen ningún valor.

¿Qué podemos hacer? Lo primero concienciarnos del problema. Los consumidores no somos lo suficientemente conscientes de las consecuencias del desperdicio alimentario, y apenas creemos que nuestros hábitos diarios pueden sumar la gran cantidad de desechos. Todos podemos poner en práctica sencillos y prácticos consejos en nuestro día a día que ayuden a una mejor gestión de los alimentos.

Desde HISPACOOP, en el 2013 lanzamos la Campaña "Sin desperdicio: aprovecha la comida", una iniciativa que pretende concienciar y sensibilizar a todos los consumidores, en especial, los más vulnerables, para un correcto aprovechamiento de los alimentos y un consumo responsable. Nuestro objetivo es reducir el desperdicio alimentario en el último eslabón de la cadena alimentaria, el consumidor.

A través de la web de la Campaña "Sin desperdicio: aprovecha la comida", el consumidor puede acceder a numerosas recetas a partir de sobras de otros platos y sus vídeos, consejos para planificar la compra y consumo de alimentos, prácticas para preservar mejor los alimentos, conocer los tipos de envases, etc…. así como otras muchas iniciativas, colaboraciones y noticias en torno al problema del desperdicio alimentario y cómo paliarlo.

Como consumidores tenemos que tomar conciencia del problema y dar el valor suficiente a los alimentos, tratando de que el acto de desperdiciar alimentos se vuelva como un comportamiento socialmente inaceptable.

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DECÁLOGO PARA UN MEJOR APROVECHAMIENTO DE LOS ALIMENTOS:

1. Comprueba los alimentos que tienes en casa y haz una lista previa de lo que necesitas.
2. Planifica la compra de acuerdo con los menús previamente elegidos y las porciones adecuadas al número de comensales.
3. Adquiere alimentos frescos sueltos, aprovecha su temporalidad y no descartes frutas y verduras con formas irregulares y calibre variado.
4. Aprende a diferenciar las fechas de consumo de los alimentos. No los consumas una vez pasada su fecha de caducidad, para evitar problemas de seguridad alimentaria.
5. Presta atención a las instrucciones de conservación de los productos.
6. Rota los alimentos, colocando los más antiguos en la parte delantera.
7. Manipula y conserva separadamente los alimentos crudos de los cocinados, y rotula con su contenido y fecha los envases o bolsas transparentes para controlarlos.
8. Evita cocinar en exceso, sobre todo si no sabes cómo aprovecharlo, adecúa la cantidad a las porciones de los comensales y sirve cantidades pequeñas de comida, siempre se puede repetir.
9. Prioriza el consumo de alimentos que vayan a caducar o que expiren su fecha de consumo preferente, incluidos los congelados.
10. Conserva o congela las sobras de otros platos en recipientes limpios, sin restos y en un tamaño adecuado, y aprovéchalas como ingredientes en nuevas recetas.