Xavi llegó a Catar al mismo tiempo que Raúl se iba. Y el catalán aprovechó toda la experiencia del excapitán madridista para emprender esa nueva andadura lejos de casa. Para empezar ocupó la misma casa. Según cuenta Xavi en «El Larguero» no dejó el madridista mucho. «Dejó nada, se llevó todo», dice entre risas. Sí mantiene Xavi, sin embargo, el mismo nombre de wi-fi, que no es otro que el nombre de su anterior inquilino, «raul». «Hablé con él antes de venir. Aquí ha dejado huella, muy buena herencia. He hecho lo mismo que hacía él. He venido a hacer el papel que desempeñaba aquí», comenta Xavi a Manu Carreño. «Es un ejemplo a nivel personal y profesional», concluye el catalán, que habla de Raúl con gran admiración.