El guirigay político
Señores políticos, dejen tranquila la manivela del twitter, digan sólo cosas interesantes y no nos cuenten toda la película

Madrid
Los nuevos medios, tan abundantes y tan cotillas, han convertido la conversación en un guirigay insoportable en el que no se conversa sino que se escupe. Todo se radia, todo se cuenta, no hay silencio y por tanto no hay eso tan hermoso que se llamó secreto. Todo es tan transparente que no hay manera de guardar la intimidad de las discusiones tranquilas. Esta es una modesta proposición para los políticos que ahora lo cuentan todo en cuanto ocurre: tranquilos, hablen ustedes y cuando ya consigan algo, cuéntenlo. Mientras tanto, dejen tranquila la manivela del twitter, digan sólo cosas interesantes y no nos cuenten toda la película.




