Austeridad y patria

Madrid

La austeridad se resiste a morir en la Unión Europea. El mensaje lanzado por los países del Sur en la minicumbre de Atenas para poner fin al dogma de la austeridad sólo ha servido para que los halcones alemanes cierren filas y descalifiquen al griego Alexis Tsipras. La salida del Reino Unido ha dado un nuevo argumento para no hacer nada al respecto en la Cumbre de Bratislava de la semana que viene. Se quiere lanzar un mensaje de unidad ante los retos de Brexit y está claro que los 27 no están de acuerdo en introducir políticas expansivas para crear empleo.

Jean Claude Juncker, no obstante, hará algunos guiños a los países del Sur en su discurso de la Unión del miércoles pero es muy probable que se centre en la crisis de los refugiados y en la necesidad de reforzar el aspecto defensivo para hacer frente a la amenaza terrorista. Claro que, en este aspecto, tampoco los socios europeos están de acuerdo. En especial, el polaco Kaczynski y el húngaro Orban que aspiran a llevar a cabo una contrarrevolución que sitúe "el patriotismo" y el rechazo a los refugiados en el centro de la construcción Europea. Trump también triunfa en Europa.