Alguien pinchó la burbuja de Calatrava
Llàtzer Moix explica a través de su libro la pérdida de éxito del famoso arquitecto valenciano
Madrid
En Hoy por hoy con Gemma Nierga nos hemos detenido en comprender qué ha ocurrido con uno de los arquitectos más famosos de España. Santiago Calatrava logró ser uno de los más afamados en el sector y en la actualidad ha conseguido acumular gran cantidad de críticas. El escritor y periodista de La Vanguardia Llàtzer Moix, nos ha ayudado a comprender la figura de este arquitecto y su trayectoria a través de su libro Queríamos un Calatrava.
¿Qué pasó con el éxito de Santiago Calatrava?
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Han sido tres décadas las que Calatrava ha protagonizado con multitud de obras, pero, al final, ha dejado la sensación de decepción entre sus clientes. ¿Cómo se ha producido este cambio? El periodista, dejando claro en el libro que no pretende derribarlo de su pedestal, ha respondido de forma desglosada algunos de las causas por las que el arquitecto perdió prestigio. Por un lado, sostiene que ha habido factores coyunturales, como la situación económica, que hacía que antes pareciera que había "recursos para todo".
Por otro lado, sostiene que los políticos que encargaban sus edificaciones, cometieron algunos excesos. Dice que sus clientes presentaban muchas veces una "habilidad discutible de cómo deben ser gestionados proyectos de esa dimensión". Por último, el mismo arquitecto comenzó a realizar modificaciones inesperadas o no entregaba sus trabajos a tiempo.
¿Cómo llegó Calatrava a llegar a lo más alto? Moix respondía así: "Los arquitectos que compiten en primera división ofrecen un producto muy personalizado y por tanto les alienta un cierto ego como proveedores de formas únicas". Sus obras pasaron a ser prácticamente iconos de las ciudades, por lo que "los clientes se entregaban de modo acrítico". A consecuencia de su prestigio, el presupuesto se podía incrementar hasta el triple.
La conclusión de su trabajo periodístico, fruto de la investigación sobre el arquitecto durante cinco años, es que "Calatrava era un gran seductor y ha pasado a ser un personaje que no suscita los mismos sentimientos".