Reformar la Constitución

Madrid

Día festivo en España, día de la Constitución, que cumple hoy 38 años con el debate abierto sobre la necesidad de su reforma. Que hay que adaptar al siglo XXI un texto elaborado a la muerte del dictador, en una situación histórica muy determinada, parece evidente. Y que esa reforma tiene que ser incluyente, que se reconozcan en ella todos los españoles, parece otra obviedad. Lo contrario siempre es un fracaso.

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Y la SER ha hablado con todos los partidos que se disponen a crear de forma inminente una subcomisión de reforma constitucional. Y la conclusión es clara: en este momento no se da el consenso básico en España para reformar la Constitución. De entrada al menos, las líneas rojas de unos y otros chocan frontalmente en el modelo territorial. Podemos choca con Ciudadanos, que comparte con el PP que la única nación es la española. Y el PSOE está dispuesto a discutir sobre nación pero no sobre autodeterminación.

Hay otros puntos sobre los que sí se adivinan consensos aunque pueda haber discrepancias de partida, como darle carácter constitucional al derecho a la Sanidad o la Educación, recortar aforamientos, eliminar la prevalencia del varón en la sucesión de la corona o incluso en asuntos más espinosos como qué hacer con el Senado. No sabemos si las líneas rojas y paralelas sobre el modelo territorial podrán superarse.

La experiencia italiana demuestra que tocar puntos centrales de la Constitución sin contar con amplios consensos transversales conduce a la división y al fracaso.