Carlos Duarte cree que aún es posible frenar los efectos del cambio climático

Madrid

Los climatólogos estadounidenses James Hansen y Syukuro Manabe, este último de origen japonés han sido los ganadores de la novena edición del premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en la categoría de Cambio Climático. Ambos se han hecho con el galardón por crear los primeros modelos computacionales para simular el comportamiento del clima y además lograron predecir, acertadamente, cuándo subiría la temperatura de la Tierra por el aumento del CO2 atmosférico. Como secretario del jurado ha participado Carlos Duarte, oceanógrafo, director del Centro de Investigación del Mar Rojo y titular de una cátedra en la Universidad Rey Abdullah de Ciencia y Tecnología, en Arabia Saudí.  Duarte ha estado este martes en La Ventana para analizar el futuro de nuestro planeta.

"Todavía estamos a tiempo de parar los efectos del cambio climático", ha señalado Duarte, que, no obstante, ha confesado que el deshielo total del Polo Norte es ya irreversible: "Las predicciones que teníamos sobre el deshielo se nos han quedado obsoletas.  Nos encontramos un Ártico completamente enloquecido. No existe ahora mismo un modelo de predicción. Tenemos un problema, se nos ha ido de las manos".

El deshielo, causado por el calentamiento global, está ocurriendo más rápido de lo que suponían los expertos y pone en grave peligro a ciudades costeras, que se verían completamente inundadas: "Shanghái, por ejemplo. Allí viven casi cincuenta y cinco millones de personas. En general, estamos hablando de las grandes urbes de Asia que están completamente en zona de riesgo". Los efectos en España también serían importantes, ya que desaparecería la isla de Formentera, la de Mallorca se dividiría en dos y el litoral mediterráneo de la Península retrocederá varios metros.

La solución para intentar ralentizar estas consecuencias sería apostar por las energías renovables para reducir la contaminación, pero España, ha argumentado Duarte, ha perdido el tren: "Teníamos las industrias mejor posicionadas del mundo y las hemos destruido en cuatro años, justo cuando se abren perspectivas de negocio importantes".