En el PP nunca pasa nada

Madrid

Ya se ha puesto en marcha el Congreso del Partido Popular. Ha empezado esta tarde, horas antes que la convulsa Asamblea de Podemos. Dos Congresos, dos ambientes, el ying y el yang. Y es curioso, porque el Congreso de los populares empieza, precisamente, el mismo día en el que podemos excluir la palabra presunto o presunta cuando hablemos de la financiación del Partido Popular.

Hoy ha habido nueve empresarios que han firmado haber pagado tres campañas electorales del PP a cambio de obra pública. Lo han hecho para atenuar sus condenas, y hay quien dirá que claro que lo hacen para rebajar su pena, pero es que si fueran inocentes no sería necesario que firmaran. O sea que blanco y en botella. Lo que ya algún juez escribió en sus autos, la financiación ilegal del PP, del partido en el gobierno, hoy lo corroboran nueve de los empresarios que pusieron la pasta.

Pero es que hoy también hemos conocido la primera sentencia por el caso Gürtel, en la rama valenciana. Hasta trece años de cárcel para los considerados cabecillas, entre ellos, alguien que ocupó un puesto destacado en el PP, Pablo Crespo. Pero también hay condena para una ex consejera del PP en la Comunitat valenciana, para un ex jefe de gabinete.... Y cuando se le preguna a los dirigentes del PP al inicio del Congreso responden que no confundas un charrán con una gaviota.

Las condenas de la Gürtel estallan en pleno Congreso y la onda sísmica ni siquiera se percibe en la caja mágica. Tan convencidos están de que las urnas les absuelven, no sé si les absuelven pero ganar ganan, que lo de la Gürtel ni les afecta. La magia de la caja mágica lo hace desaparecer.

Sin preocupación por la Gürtel, sin preocupación por el liderazgo, sin debate, sin ideas, porque no las necesitan. Fin de semana de Congreso del PP, fin de semana de trámite porque el lunes, una vez superado, todos se sentaran a observar que cadáveres han dejado los Congresos o las fiestas de los otros partidos. Porque en el PP nunca pasa nada.