De héroes y arrogantes
Reflexión tras la victoria del Barcelona y la apropiación de su triunfo

Madrid
El Barcelona acometió ayer una tarea de héroes… futbolísticos; fue un gran espectáculo deportivo de superación, rabia y autoestima, que dio de sí un triunfo insólito en la competición que juega. Este equipo, del que soy ferviente aficionado, reúne una multinacional de jugadores, futbolistas de todas partes y aficionados en todo el mundo. Atribuir ese triunfo del Barcelona al carácter de Cataluña, y exponerlo como metáfora de la independencia que quiere el partido de Puigdemont no sólo es una arrogancia estúpida sino una apropiación indebida de un éxito hallado en la práctica del fútbol, este deporte hermoso que responde al esfuerzo y al azar.




