Cine

Lecciones de Groucho Marx para tuiteros

Se cumplen 40 años de la muerte del cineasta y humorista que, además de películas como 'Sopa de ganso' o 'Una noche en la ópera', nos ha dejado un legado de frases mucho mejores que cualquier tuit

Cadena SER14/07/2017 - 10:14 UTC

Madrid

Groucho Marx hubiera sido una tuit star de haber nacido un siglo después. El miembro más locuaz y bigotudo de los Hermanos Marx, comenzó a hacer sus pinitos en Broadway. Con el cine sonoro se mudaron a Hollywood de la mano de la Paramount con películas como El conflicto de los Marx y Sopa de ganso. Después ficharon por la Metro a la que pertenecen sus películas más célebres como Una noche en la ópera y Un día en las carreras.

Las frases de groucho marx que podrían ser un tuit

"La inteligencia militar es una contradicción en sus términos" "Si un gato negro se cruza en su camino eso significa que va a algún sitio" "La política no hace extraños compañeros de cama. El matrimonio sí" "La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados". "Hijo mío, la felicidad está hecha de pequeñas cosas: un pequeño yate, una pequeña mansión, una pequeña fortuna". "Estos son mis principios. Si no le gustan tengo otros". "Encuentro la televisión muy educativa. Cada vez que alguien la enciende, me retiro a otra habitación y leo un libro". "Él puede parecer un idiota y actuar como un idiota. Pero no se deje engañar. Es realmente un idiota". Cuando muera quiero que me incineren y que el diez por ciento de mis cenizas sean vertidas sobre mi empresario. ¡Hay tantas cosas en la vida más importantes que el dinero... ¡pero cuestan tanto! Sólo hay una forma de saber si un hombre es honesto: preguntárselo. Y si responde sí, entonces sabes que está corrupto. Todavía no sé qué me vas a preguntar, pero me opongo. Yo me he esforzado para llegar de la nada a la pobreza extrema. Dice que... la parte contratante de la primera parte será considerada como la parte contratante de la primera parte. ¿A quién va usted a creer, a mí o a sus propios ojos? Citadme diciendo que me han citado mal.

Los hermanos se iban de gira con la farándula puliendo su espectáculo y luego utilizaban los mejores gags en las películas dando también su espacio a la improvisación. Groucho, de grouch, "gruñón" en inglés, se ponía un mostacho postizo muy incómodo y un día decidió quitárselo y pintarse uno con betún, con lo que configuró parte de la iconografía de su personaje a la que añadió sus andares, su puro en la boca, sus cejas pobladas, su habano y sus gafas de metal. Su papel más común fue el de ese abogado de verbo fácil, un pícaro a la caza de una ricachona con la que casarse.

Groucho Marx murió el 19 de agosto de 1977 en Los Ángeles. Días antes había hecho una broma en una entrevista, en la que aseguraba que en su lápida pondría "perdonen que no me levante". Un epitafio que no existe pero que, sin duda, es el más ingenioso, digno de este humorista y cineasta, cuyo legado sigue en el cine actual.

Pepa Blanes

Es jefa de Cultura de la Cadena SER. Licenciada en Periodismo por la UCM y Máster en Análisis Sociocultural...