“Hay gente que ha comprado móviles por Internet y ha recibido gafas de sol”
En el último SER Consumidor, la inspectora de la Unidad de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional explicó cuáles son las referencias a tener en cuenta para comprar con seguridad en Internet
(Getty Images)
Madrid
“Ha habido casos de gente que ha comprado teléfonos móviles a vendedores no muy fiables y cuando les ha llegado el paquete a casa, en el interior han encontrado unas gafas de sol”. Este es sólo uno de los ejemplos de ciberdelincuencia que la Inspectora de la Unidad Investigación Tecnológica de la Policía Nacional -por motivos de seguridad no deseó desvelar su identidad- relató a los micrófonos de SER Consumidor en su última edición.
“Hay gente que ha comprado móviles por Internet y ha recibido gafas de sol”
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El trabajo de su brigada consiste en evitar el uso de técnicas fraudulentas en Internet, y es que como ella misma explicó, “el fraude en Internet ha existido desde su creación”. En España el comercio online creció un 23% en el último año, llegando a facturar casi 7.500 millones de €, lo que le ha convertido en un pastel demasiado grande para no ser víctima de robos y engaños, “especialmente en fechas como las Rebajas, las Navidades o el ‘Black Friday’”, señalaba la inspectora.
Las técnicas de estafa electrónicas son numerosas. Una de ellas supuestos correos electrónicos ‘oficiales’ con facturas bancarias o de la luz también son objeto de fraude, ya que como explicó a SER Consumidor la inspectora de la Unidad de Investigación Tecnológica de la Policía Nacional, “estos e-mails lo que hacen es introducir un malware en tu ordenador que ‘roba’ tus datos”. Otro caso, por ejemplo, es el de los coches lujosos de segunda mano: “Hay vehículos de alta gama que aparecen a un precio muy bajo con excusas variopintas, como que el dueño está en el extranjero. Además, suelen exigir dinero por adelantado, por lo que casi siempre se suele tratar de fraudes”, contó la inspectora.
Las precauciones a tener en cuenta son varias, pero especialmente, según señala la inspectora, hay que tener en cuenta tres: “En primer lugar, al entrar en la página web, debemos asegurarnos que tiene un certificado de seguridad (candadito que aparece junto al dominio de la web); también hay que fijarse si la web contiene algún tipo de sello de excelencia, así como de contacto legal explícito. Pero, sobre todo, hay que reparar en las modalidades de pago: si se indican varios, pero al final sólo admiten tarjetas bancarias, hay que sospechar. Las páginas webs legales suelen ofrecer varios métodos”, explicó.
Por supuesto, se recomienda “fijarse bien en los precios y en las valoraciones de los vendedores”, ya que si son excesivamente baratos pueden ser sinónimo de falsificaciones o timos, algo que puede “costar más de un disgusto”.
