"El secreto de esta edición ha sido la magia. Y eso no se puede controlar"

Madrid

Tres meses más tarde, ayer terminó la edición de Operación Triunfo con la victoria de la pamplonesa Amaia y una audiencia record de cuatro millones de espectadores, con un histórico 30% de Share.

Hemos hablado con Roberto Leal, presentador de esta edición, aún renqueante de una noche "que se alargó un poco".  Leal es el presentador de moda, al que después de muchos años de profesión, al fin le ha llegado su gran momento de popularidad. "Me paran por la calle, tanto jóvenes de catorce años, como sus madres". Leal reconoce que "Este programa me ha venido fenomenal"

Puede parecer que la marca Operación Triunfo era sinónimo de éxito asegurado, pero Roberto Leal desvela que tuvo sus dudas al principio. "Es un programa que vivía en cierta forma de la nostalgia, y eso se te puede venir en contra".

La verdad es que todos recordamos el OT de Bisbal y Chenoa, pero después hubo muchas más ediciones, y no todas tuvieron la misma repercusión. El secreto de esta edición, según nos reconoce el propio Roberto Leal, "es la magia", un intangible que "No se puede controlar. Tú intentas llevar el formato por un lado o por otro, pero al final surge algo, sea por el casting o por lo que sea, que hace que el prógrama sea mágico".

Desde luego, todos los espectadores encantados darán la razón a Roberto Leal, para el que este final no es sino un principio, al igual que para los chicos de la Academia, a los que ahora les aguarda una Gira Nacional, lanzamiento de discos y, para Amaia y Alfred, representar a todo el país en el próximo Festival de Eurovisión.

Esta edición de Operación Triunfo ya se puede considerar el fenómeno cultural del año. Y es que, como dice Roberto Leal, "Esto se nos ha ido completamente de las manos... en el buen sentido".