Una sexagenaria llamada Sharon Stone

Madrid

Fue el mito erótico por excelencia del cine de los años 90 gracias a “Instinto básico”, la película que le lanzó a la fama. Cuando le llegó su momento Sharon Stone ya no era una jovencita, tenía 35 años y una carrera llena de películas malas y frustración. Pero la actriz supo aprovechar su oportunidad. El papel de la escritora amiga de los picahielos se lo habían ofrecido antes a Julia Roberts, Melanie Griffith y Michelle Pfeiffer pero todas lo habían rechazado asustadas por su carga erótica. Sharon Stone convenció al director Paul Verhoeven de que para llegar a donde quería llegar era mejor trabajar con una actriz no demasiado conocida y acertó de pleno. A partir de entonces su suerte cambió para siempre. En este reportaje repasamos el camino que le había llevado hasta allí.